El cineasta cada vez que mira la película en una pantalla grande, la sigue viendo con el mismo cariño que cuando soñó en hacerla
Isabel Nigenda Noticias
Vaychiletik de Xun Pérez, recibió el «Premio Patrimonio Cultural Inmaterial» – Prix du PATRIMOINE VIVANT | LIVING HERITAGE Prize – en el 41 Festival International Jean Rouch – Comité du film ethnographique.
Por ello, resalta que más allá de los reconocimientos en los festivales, lo maravilloso es ver la reacción del público, los comentarios, las reflexiones y las preguntas que le dejan al debatir algún tema que toca la peli: «También el conocer otro mundo es muy rico compartir y aprender de ello».
Al respecto, el cineasta originario del pueblo maya tsotsil de Zinacantán, cada vez que mira la película en una pantalla grande, la sigue viendo con el mismo cariño que cuando soñó en hacerla.
La historia que se proyecta en la pantalla grande hace referencia a un músico tradicional del pueblo, su padre, a quien se le otorgó por medio de un sueño el don de ser un músico tradicional. Los sueños son fundamentales para la cosmovisión maya de tsotsiles y tseltales de los Altos de Chiapas.
Confiesa que siente una gran satisfacción que la película se vea en otras partes del mundo, «a la vez siento gran responsabilidad por compartir una historia de mi familia, me emociona que el público se interese, se identifique y sienta emociones que ellos no pueden describir al ver la película. Me dicen que es una historia muy íntima. Se ha debatido el papel de la mujer de las culturas originarias, mostrar la peli en otros contextos me ayuda a reflexionar y seguir aprendiendo sobre el quehacer y la memoria de mi cultura tsotsil».
Al preguntarle qué es más importante para él y en esta película ¿la imagen o la palabra?, comenta que ambas, «así como el sonido y la memoria, juntas construyen una serie de emociones donde el espectador puede entrar como en otro mundo que está a punto de explorar».
Xun Pérez comparte que con este documental sigue viendo con los mismos ojos a su cultura, a su música y a su padre, «lo veo con los mismos ojos, con el mismo amor y respeto, el documental tiene la intención de abrir una ventana al espectador, y a la propia comunidad para que ellos mismos puedan cuestionar o identificarse con esta historia […] Poco a poco el cine hecho por personas de pueblos originarios comienza a florecer».
