Este sitio turístico recibe semanalmente a más de mil visitantes entre ellos personas con alguna discapacidad

Daniela Grajales NOTICIAS

PIE DE FOTO. Personal del ZOOMAT se capacitó para darles mejor atención, a partir de este mes comienzan los recorridos guiados en lenguaje de señas mexicanas. Foto: Daniela Grajales

Con el propósito de mejorar los servicios para la población con discapacidad auditiva, personal del zoológico Miguel Álvarez del Toro, se capacitó para darles mejor atención, a partir de este mes comienzan los recorridos guiados en lenguaje de señas mexicanas.
Cabe mencionar que en temporadas bajas hay alrededor de 2 mil a 3 mil visitantes a la semana, en temporadas altas hasta seis mil visitantes en una semana, entre los visitantes al ZooMAT, hay personas con discapacidad auditiva, por lo tanto han implementado estos recorridos.
Joel Miceli, director de esta reserva ecológica mencionó que de acuerdo a la política de inclusión este sitio avanza favorablemente.
“Tenemos una política de inclusión, donde estamos abarcando ya a las personas sordas, ya teníamos anteriormente facilidades en la mayoría de nuestras aéreas para las personas que tienen alguna discapacidad motora y que necesitan moverse en silla de ruedas, tenemos sillas de ruedas, tenemos disponibles, y también tenemos las rampas para este fin”.
Por un período de ocho meses, personal de esta reserva ecológica se capacitó, convirtiéndose en uno de los sitios turísticos incluyentes en el estado
“Tenemos un grupo numeroso 24 de nuestros trabajadores y trabajadoras se capacitaron durante un periodo largo, en el lenguaje de señas, y desde ahora tenemos todo el recorrido con la posibilidad de una interpretación y una traducción, en esta lengua mexicana de señas”.
De acuerdo a la federación de sordos, en México existen 2.4 millones de personas con discapacidad auditiva y en Tuxtla Gutiérrez hay más de 7 mil personas con esta discapacidad.
En Chiapas no existe una escuela especial para estas personas, la falta de inclusión es evidente en muchos sectores, por ejemplo, antes había un intérprete en el hospital, ahora ya no, una clase de lenguaje de señas cuesta alrededor de 100 pesos la hora o hasta 1000 por clase.
Los sectores de la población más rezagada son los jóvenes sordos de entre 15 y 29 años; de los 124 mil 554 con esta discapacidad, 28%, es decir 34 mil 875, no tuvieron ningún tipo de educación.
Para los 597 mil 566 sordos en edad adulta, que tienen entre 30 y 59 años, el contexto no es tan diferente. El 14% nunca fue a la escuela y dos terceras partes (400 mil 369) sólo estudió hasta nivel básico: primaria o secundaria.
La falta de lugares especiales en donde se les transmitan los conocimientos mediante lenguaje de señas repercute en el desarrollo profesional de estos mexicanos.
ESTADÍSTICAS
Tres de cada 10 jóvenes sordos, es decir 41 mil 103, obtienen recursos para vivir mediante un trabajo fijo. El 67% (83 mil 451) tienen que buscar ingresos por otros medios como programas de gobierno, pensiones, renta de inmuebles o cualquier otra labor. En los adultos la situación es similar. La mitad, es decir 304 mil 758, no cuentan con recursos económicos propios.