Gerardo Murillo Coronado, un artista cuyo legado sigue resonando en el mundo del arte y la ciencia

Isabel Nigenda Noticias

La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) se unen para celebrar el 148 aniversario del nacimiento de Gerardo Murillo Coronado, mejor conocido como Dr. Atl, un artista polifacético cuyo legado sigue resonando en el mundo del arte y la ciencia. Nacido el 3 de octubre de 1875 y fallecido el 15 de agosto de 1964, Dr. Atl es recordado como un pionero que desdibujó los límites entre el arte y la ciencia.

En una entrevista con David Caliz, curador del Museo Nacional de Arte (Munal), se destacó la contemporaneidad y la versatilidad de Dr. Atl como artista. Caliz expresó que es imposible abordar todas las facetas de Dr. Atl, ya que fue uno de los artistas más prolíficos y multidisciplinarios de México. Sin embargo, resaltó tres aspectos clave de su vida y obra: su pasión por la vulcanología, su profundo conocimiento geológico y su fascinación por la teosofía.

Dr. Atl fue un lector ávido de la filosofía de Friedrich Nietzsche y un apasionado senderista. Estos dos aspectos influyeron en su enfoque artístico, que concebía como una experiencia estética frente a la naturaleza. Caliz destacó cómo Dr. Atl capturó en sus pinturas momentos específicos del día, como el atardecer o el amanecer, durante sus ascensos a las montañas.

El Munal alberga una destacada colección de obras de Dr. Atl que exploran la importancia del paisaje en México y cómo revolucionó este género artístico. Dr. Atl tuvo un impacto significativo en la Academia de San Carlos y contribuyó a su renovación a principios del siglo XX. Además, su influencia europea, especialmente su experiencia con el futurismo en Italia, se refleja en las dimensiones de sus paisajes, especialmente en su última etapa artística.

Uno de los logros más notables de Dr. Atl fue la creación del «Atl-color», una técnica que demostró su profundo conocimiento de los aglutinantes, las resinas y el pastel. También se destacó en la manipulación de la forma, la composición y la perspectiva en sus obras.

El legado de Dr. Atl trasciende generaciones y sigue siendo relevante en la actualidad. El curador señaló que las fotografías panorámicas capturadas con drones hoy en día eran una práctica que Dr. Atl ya realizaba en sus pinturas, utilizando vuelos en avioneta para capturar vistas espectaculares. Este enfoque influyó en la creación de obras con un carácter futurista y su experimentación con la captura de la velocidad en la pintura durante las décadas de 1950 y 1960.

Un momento fundamental en la vida de Dr. Atl fue el nacimiento del volcán Paricutín en 1943. Dr. Atl registró este fenómeno en más de 170 dibujos detallados que ahora forman parte de la colección del Munal. Estos dibujos no solo destacan por su calidad artística, sino también por su valor científico al proporcionar información sobre la formación de un volcán y sus erupciones.

La obra «El volcán en la noche estrellada» (1945) es un ejemplo de cómo Dr. Atl logró combinar elementos artísticos y científicos en su trabajo. Esta pintura muestra la importancia de Dr. Atl en términos estéticos y presenta perspectivas curvilíneas que él heredó del maestro Luis G. Serrano.

Foto: Cortesía.

Pie de foto: Uno de los logros más notables de Dr. Atl fue la creación del “Atl-color”.