Este premio representa un aliciente para seguir preparándose y explorar su escritura más allá de la poesía
Isabel Nigenda Noticias
Mónica Zepeda está muy contenta por haber obtenido el Tercer Lugar del VI Premio Literario Internacional «Letras de Iberoamérica 2022», en el género de Cuento Corto con la obra «Acerca de tiempos remotos».
En entrevista, la escritora y poeta subraya que este premio representa un aliciente para seguir preparándose y explorar su escritura más allá de la poesía.
Sobre el surgimiento del cuento, refiere que tenía la inquietud de mirar a través de las letras, desde fuera y desde lejos, de distorsionar un poco la realidad que vivía durante los primeros años de la década de sus veintes. La historia se puede leer en el siguiente link http://ensentidofigurado.com/ESF107-13c.pdf
«En cada escrito, busco conocerme más. Y sin duda, desarrollar mis habilidades literarias. Por eso procuro escribir diario, leer diario y corregir y corregir a cada tanto lo que escribo. El estudio es parte fundamental en mi vida y para el oficio de la escritura», menciona.
Al preguntarle qué le permite el género de cuento, responde que siente que la versatilidad de géneros es un aspecto indispensable para desarrollarse como escritor.
«Gracias a la licenciatura, aprendí a escribir distintos géneros, incluso teatro y guion cinematográfico. Me llama mucho la atención el cuento, la poesía y el ensayo. Este último representa un reto muy grande para mí. Quiero seguir explorando varios géneros. Uno de mis sueños es escribir un libro infantil. Espero algún día llegar a realizarlo», comparte.
Mónica Zepeda es escritora y poeta. Ha participado en diversas mesas de lectura; así también, ha publicado su obra en diversos espacios. Ella escribe porque no concibe su vida ajena a la lectura ni a la escritura, porque son dos de los pilares más significativos con los que logra sentirse en plenitud.
«Escribo principalmente para conocerme y salvarme. Y escribo también con la ilusión de que alguien más pueda llegar a identificarse con mis letras y logre hacerlas suyas y pueda también, en caso necesario, salvarse así mismo. Escribo, pues, para recordar o al menos sentir que allá afuera hay personas que pudieran estar pasando lo que yo pasé y quisiera ayudarlas de alguna manera y que mi palabra, también a ellas, les pueda servir», puntualiza.
