Han dejado unos 40,000 migrantes varados y podrán incrementarse en junio por las deportaciones que se avecinan
Sergio Garcìa CORRESPONSAL / NOTICIAS

Tapachula.- Activistas mexicanos y migrantes varados en la Frontera Sur, límite con Centroamérica, se sienten desalentados y ahora se enfrentan a una triste realidad, el endurecimiento y el incremento de las políticas restrictivas implementadas por el gobierno de Estados Unidos.
Luis Rey García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana, consideró que las políticas migratorias del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, han dejado unos 40,000 migrantes varados y podrán incrementarse en junio por las deportaciones que se avecinan.
“Racista, xenofóbica, clasista y elitista, eso es la política migratoria de Donald Trump, que esperamos que no se repita aquí en México muy difícil yo pienso que hay una especie de shock, un golpe duro en el ánimo de la población migrante de cualquiera de las nacionalidades, porque el efecto Trump fue devastador y catastrófico porque sigue endureciendo su política migratoria en contra de las clases más vulnerables que son los pobres”.
El activista mexicano, estableció que Donald Trump, no cesará durante sus cuatro años de mandato con sus medidas que se van endureciendo su política migratoria, sin embargo, externo su preocupación por los altos niveles de odio, xenofobia y discriminación contra la población migrante en la frontera sur.
La migrante de Honduras, Dilsia Esperanza, tenía la esperanza de poder llegar a los Estados Unidos, pero al llegar el presidente Donald Trump, todas sus ilusiones se terminaron y ahora se enfocó en regularizarse para quedarse en México.
Esta centroamericana ya cuenta con su residencia permanente y fue acogida por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), quien le ha ayudado para trasladarla a otra ciudad importante para poder trabajar y mejorar su situación económica y su vida.
“La verdad muy triste porque si dan esos permisos no son como México, nos da la oportunidad de que podamos trabajar y podamos estar alojados acá, entonces él no debería hacer eso también porque se siente triste, porque lo único que ha logrado lo quiere tener siempre, y si él permitió que las personas migrantes al país del ahora imaginé el regreso acá uno no es que no quiera estar en su país, pero surgen problemas por el trabajo deben dejar el país”.
A los migrantes que les revocaron el permiso de CBP ONE, les deseo fortaleza, fuerza y que se puedan alojar en México, porque es un país de oportunidades. En tanto que la migrante hondureña, Mirna Estela Ramírez, destacó que el haber revocado los permisos de CBP ONE a los migrantes es algo impactante para todos los migrantes y muchos han quedado en la incertidumbre donde algunos han quedado en México esperando sus documentos para poder trabajar,
“Si, bastante porque están muchas las deportaciones y es injusto porque hacemos muchos migrantes que lo que queremos es ir a trabajar dignamente y limpiamente, pero no se nos permitió entonces nos quedamos, México es un país acogedor me encanta México, las personas, el ambiente laboral y dan mucha ayuda en los trámites y la alimentación”,
PIE DE FOTO:
Activistas mexicanos y migrantes varados en la Frontera Sur, se sienten desalentados y ahora se enfrentan a una triste realidad.
Foto: Sergio Garcìa