Porque existe una notable reducción de estos insectos
Sergio García CORRESPONSAL / NOTICIAS
Investigadores en la Frontera Sur de México, hacen un llamado urgente a la sociedad en general, a los agricultores y las autoridades gubernamentales a establecer medidas más estrictas para proteger y preservar a las abejas y otros polinizadores de la región Soconusco.
Dado que los polinizadores, especialmente las abejas, son esenciales para la biodiversidad, la agricultura y la reproducción de muchas especies vegetales, desde el Colegio de la Frontera Sur, instan a eficientar las normas para el uso correcto de pesticidas o agroquímico en la agricultura regional, porque existe una notable reducción de estos insectos, explicó Daniel Sánchez Guillen, investigador de ECOSUR.
Para proteger a abejas, mariposas y otros insectos, el objetivo primordial es acelerar la reducción del uso de plaguicidas.
El problema por el que atraviesan las abejas, reducción de hábitat, menos flores para alimentarse y uso indiscriminado de agroquímicos, disminuye su población drásticamente; por ello, es urgente presentar un programa de acción a gran escala con recursos suficientes para detener la presencia de los plaguicidas en el hábitat de las abejas.
Además, comenzar una campaña de socialización para que la gente conozca la importancia de las abejas en el ecosistema y en la misma generación de alimentos de consumo humano.
Tan grave es la contaminación del ecosistema que afecta en la vida de las abejas, que se ha encontrado restos de plaguicidas en la miel de las colmenas.
Ambiental
Existe una estrecha relación de la supervivencia humana con la de los polinizadores.
La polinización es un proceso fundamental para la supervivencia de los ecosistemas, esencial para la producción y reproducción de muchos cultivos y plantas silvestres.
Casi el 90 por ciento de las plantas con flores dependen de la polinización para reproducirse; asimismo, el 75 por ciento de los cultivos alimentarios del mundo dependen en cierta medida de la polinización y el 35 de las tierras agrícolas mundiales.
Los polinizadores no solo contribuyen directamente a la seguridad alimentaria, sino que además son indispensables para conservar la biodiversidad, según información de las Naciones Unidas.
