Podría generar resistencia como los antibióticos, su mal uso afectaría las defensas
Daniela Grajales / NOTICIAS
El epidemiólogo, James Gómez Montes, dio a conocer que la píldora contra la COVID-19, puede llegar a tener algunos riesgos en la población, por lo que ve de buena forma, que ésta, sólo se distribuya a través del sector público.
«Son unas píldoras, unas cápsulas que están avaladas por la Organización Mundial de la Salud, esto significa que pasan por un control de calidad bastante severo para poder sacarlas al mercado, va a estar solamente en lo público, en lo privado no, porque si no cualquier persona puede comprarlo y al rato cualquiera puede tener resistencias», comentó el experto en la materia.
Agregó que la resistencia es similar a lo que pasa con los antibióticos, el mal uso e indiscriminado, genera resistencia y si esta píldora sale a la venta, puede suceder lo mismo, que existan resistencias, y va a causar que las defensas no sirvan después.
«Tener en cuenta que son medicamentos y así lo han anunciado, que son para enfermedades leves, y para enfermedades que no requieren hospitalización, no tienen utilidad con un hospitalizado grave».
Además que también puede existir la posibilidad de que alguien sea alérgico a un medicamento nuevo que no conocemos, cómo en este caso, lo que puede causar alguna reacción alérgica, como todos los efectos adversos de cualquier medicamento.
Cabe mencionar, que la píldora contra la COVID-19 ya fue aprobada en la República Mexicana, y es del laboratorio de Pfizer, y hasta el momento sólo será el sector salud, quien se encargue de distribuir u otorgar este medicamento a la población que lo requiera.
Cofepris indicó que la píldora anti COVID de Pfizer requiere prescripción médica y considerando los factores de uso y riesgos detallados en el oficio de autorización para evitar el mal uso de este medicamento.
Los componentes de la píldora, Nirmatrelvir y Ritonavir, reducen hasta en 88% las hospitalizaciones y muertes por el SARS-CoV-2. De acuerdo con la dependencia la primera sustancia inhibe la proteína del coronavirus, lo que evita que el virus se replique, mientras que el otro evita la descomposición del medicamento para que permanezca más tiempo en el organismo.
«Tener en cuenta que son medicamentos y así lo han anunciado, que son para enfermedades leves, y para enfermedades que no requieren hospitalización, no tienen utilidad con un hospitalizado grave».
