Un suceso que cambió para siempre la vida de los zoques
Isabel Nigenda
Noticias
El 28 de marzo, se cumplieron 41 años de la erupción del volcán Chichón, un suceso que cambió para siempre la vida de los zoques y puso en evidencia las diferencias culturales y sociales entre ellos y los caxlanes.
La erupción, que afectó principalmente al municipio de Francisco León, dejó más de 20 mil personas afectadas y marcó el inicio de un proceso de migración de los zoques hacia otras regiones del país.
Lo que resulta aún más interesante de esta historia es la cosmovisión de los zoques y su capacidad para prever la erupción del volcán a través de sus sueños y la presencia de la Pyogba Chu’we, la señora que arde. Sin embargo, las autoridades de la época no dieron crédito a sus advertencias y la tragedia se consumó.
A pesar de las dificultades, los zoques han logrado sobrevivir y adaptarse a nuevas condiciones de vida. Muchos de ellos han emigrado a otras regiones del país, donde han creado nuevas raíces y han formado comunidades de habla que congregan el idioma zoque. Además, un grupo cada vez más numeroso de jóvenes creadores zoques, profesionistas e intelectuales está trabajando para revitalizar su cultura milenaria desde nuevas perspectivas.
El municipio de Francisco León, por su parte, ha sido rehabilitado y hoy en día se pueden ver de nuevo crecer las plantas del complejo agrícola mesoamericano, como el maíz, el frijol, el chile y la calabaza.
