El objetivo del proyecto es generar conciencia sobre la crisis hídrica y el impacto ambiental

Karla Gómez NOTICIAS

El escultor y artista multidisciplinario Víctor Hugo Rodríguez Juárez desarrolla Anima Terra, un proyecto que explora la relación entre tecnología, reciclaje y naturaleza, a través de instalaciones escultóricas interactivas.

Seleccionado en la convocatoria del Programa de Apoyo a la Producción e Investigación en Arte, Medios y Discapacidad (PAPIAM-D) 2023, que otorga el Centro Nacional de las Artes (CENART), el proyecto combina el uso de materiales reciclados y circuitos electrónicos para crear piezas que reflexionan sobre el impacto ambiental y la conexión humana con el entorno.

«Mi trabajo siempre ha girado en torno a la relación entre lo orgánico y lo artificial», explica Rodríguez Juárez en entrevista. «En este proyecto, me interesó trabajar con materiales reciclados, como plástico PET, y tecnologías, como la impresión 3D, para construir esculturas que funcionen como una segunda capa dentro de la naturaleza, reflexionando sobre cómo coexistimos con ella».

Nacido en 1986 en el Estado de México, el creador se formó como artista plástico en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado «La Esmeralda». Desde sus inicios, su obra se ha caracterizado por el uso de tecnologías y materiales que replantean la relación entre las creaciones humanas y la naturaleza.

«Crecer en un entorno rural cerca de Zumpango me hizo muy consciente de la falta de equilibrio entre el hombre y la naturaleza. Al principio quise estudiar Filosofía para abordar estas cuestiones, pero encontré en el arte una manera tangible de explorar y comunicar estas ideas», comenta.

A lo largo de su carrera, ha recibido importantes reconocimientos y apoyos como la beca Jóvenes Creadores (2010) del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, el premio de producción VIDA 14 en España (2014) y el Premio de Producción de La Colmena: Centro de Tecnologías Creativas Grace Quintanilla (2022). Además, ha exhibido su obra en espacios como el Museo de Arte Abstracto Manuel Felguérez en Zacatecas y el Laboratorio Arte Alameda, durante el Festival de Artes Electrónicas Transitio_MX05.

De acuerdo con el artista, Anima Terra se centra en la creación de esculturas lumínicas y cinéticas que integran datos ambientales y económicos en tiempo real. «Por ejemplo, una de las piezas utiliza sensores para medir la humedad y la temperatura del ambiente, combinando estos datos con información de la Bolsa de Valores relacionada con las empresas que producen envases de PET. Estas capas de información interactúan para generar movimiento y luz en las esculturas», explica el artista.

El proyecto también incluye un fuerte componente de reciclaje. «Las piezas están hechas de plástico PET recolectado, procesado mediante tecnologías de impresión 3D. Esto no solo busca un impacto visual y conceptual, sino también una reflexión sobre el consumo y la gestión de residuos», detalla.

Foto: Karla Gómez

Pie de foto:  Desde sus inicios, su obra se ha caracterizado por el uso de tecnologías y materiales que replantean la relación entre las creaciones humanas y la naturaleza.