“El libro está vivo y existe mientras exista un lector para él”: Juan Carlos Mejía
Karla Gómez Noticias
“El tiempo de vida de un libro, es un tema complejo, en el aspecto físico hay veces que los libros sobreviven durante muchos años, depende de muchos factores, del cuidado y de los materiales. Actualmente, la lectura digital y otros tipos de formatos y maneras de leer, hacen que los libros perduren de manera indefinida. Lo importante es saber que el libro está vivo y existe mientras exista un lector para él”, menciona en entrevista el librero Juan Carlos Mejía.
El entrevistado desde hace seis meses acude a la Vía del Libro, ubicado en Corredor de Arte Tarumba del Centro Cultural de Chiapas Jaime Sabines, de lunes a viernes, de 11:00 a 17:00 horas. En ese espacio, se promueve la lectura, a través de la compra, venta e intercambio de libros.
Libros de diversos géneros, como poesía y novela, así como de arte, de fotografía, de divulgación científica y técnicos, son parte de los ejemplares que se exhiben, con el fin de generar estrategias paralelas a los modos tradicionales en el que se distribuye o se promueve el hábito de la lectura.
En el marco del Día Mundial del Libro y Derecho de Autor, el entrevistado menciona que realizar intercambios de libros implica darle un nuevo valor al libro y también ser consciente en el tema de consumo.
“Nuestras relaciones que tienen que ver con el tema de consumo, tanto de productos culturales como de otros sectores, a veces es de utilizar y tirar. En este caso, si las personas tienen libros que no leen en su casa, es momento de intercambiar o llevarlos a nuevos lectores”, comparte el librero.
Resalta que un lector es quien libremente elige los libros que le interesa, pero también desde otra perspectiva es capaz de dialogar con el autor, fotógrafo o pintor, ya que considera que un lector, no sólo solo es un lector de palabras, es también un lector del mundo en general y de experiencias vitales.
“Desde la perspectiva de las estadísticas, comúnmente se piensa que, las y los lectores surgen por contagio; a veces a través de la relación con un familiar cercano o profesor que en algún momento de nuestra infancia tenía el hábito de la lectura y eso fue una impresión”, apunta.
Así también puntualiza que la mejor manera de crear lectores es poner a disposición a todo aquel que se interese en cualquier momento y lugar de un material de lectura, ya sea un libro físico o digital.
Foto: Karla Gómez
Pie de foto: Darle un nuevo valor al libro.