Entrevista con Édgar Zenteno, promotor cultural de la Casa Cultural Napiniaca en Chiapa de Corzo, Chiapas

Isabel Nigenda Noticias

En el corazón de Chiapa de Corzo, una pequeña localidad imbuida de historia y tradición, florece una celebración única que fusiona teatro, religión y hermandad. En esta entrevista, Édgar Zenteno, un promotor cultural y miembro activo de la Casa Cultural Napiniaca, nos guía a través de la fascinante escenificación que tiene lugar cada ocho de agosto, rindiendo homenaje a Santo Domingo de Guzmán, en un evento que conecta el pasado colonial con la vida de la comunidad actual.
La escenificación es una manifestación cultural arraigada en el tejido de Chiapa de Corzo. Zenteno comparte que esta celebración tiene sus raíces en las fiestas que conmemoraban la victoria del cristianismo e islamismo. Se trata de un paisaje de conquista y defensa de territorio, cultura y fe. Una forma de teatro popular que forma parte de la evangelización llevada a cabo por los dominicos en la época colonial, encontrando un camino para conectar con los antiguos chiapanecas.
En esta puesta en escena, los bandos de los Nahuarés (los Moros) y los Alférez (los españoles) representan una lucha simbólica, donde cada uno defiende su causa.
La música juega un papel vital en esta celebración. Antiguos cantos chiapanecas de resuenan, reflejando los elementos de Alférez, Nahuarés y de Santo Domingo. Zenteno también menciona el uso de documentos históricos, como «Nadalumi leyenda de mi pueblo» de Ángel M. Corzo, que detallan las festividades de Santo Domingo en el pasado.
El día de la celebración, cada bando tiene su patrón, y miembros de la comunidad se unen para encarnar a estos personajes. El ambiente está impregnado de un sentido de comunidad y colaboración, y el recorrido de los bandos por las calles se convierte en un evento unificador. La música de tambor y pito, una característica única de esta tradición, añade un elemento de autenticidad a la experiencia.
A medida que esta escenificación evoluciona, la hermandad y el respeto entre los bandos se vuelven evidentes. Aunque en sus orígenes puede haber representado una lucha, ahora se trata de una oportunidad para expresar valores compartidos y lanzar una plegaria conjunta a Santo Domingo de Guzmán.

Foto: Isabel Nigenda.
Pie de foto: Un paisaje de conquista y defensa de territorio, cultura y fe.