Karla Gómez NOTICIAS
Con el propósito de explorar las distintas formas en que se representó el ciclo de la Pasión de Cristo en los siglos XVI y XVII, el Museo Nacional de San Carlos, en colaboración con la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), presenta la exposición Ritos y símbolos de la Pascua Cristiana. Esta muestra, que estará abierta hasta el 25 de mayo, ofrece a los visitantes una profunda mirada a las imágenes que fundamentaron la doctrina cristiana y su evolución a lo largo de los siglos.
En el recorrido, los asistentes podrán apreciar representaciones de momentos clave en la vida de Cristo, tales como la expulsión de los mercaderes del templo, el despojo de sus vestiduras, el calvario, el entierro, la resurrección, y escenas emblemáticas como el descendimiento de la cruz y Magdalena en su tumba. Estas imágenes no solo revelan el sufrimiento y la redención, sino también el simbolismo profundo que se ha transmitido a través de los siglos.
Además de las representaciones artísticas, la exposición presenta reproducciones de importantes obras, como el mural del Ecce Homo del exconvento de San Andrés Apóstol en Epazoyucan, Hidalgo, y un fresco del calvario de Jesús del convento de Acolman, Estado de México. También se incluyen fotografías de las tradicionales actividades de la Semana Santa en Iztapalapa y de las quemas de Judas en las calles de Tacuba, Ciudad de México, con imágenes tomadas en 1920, que reflejan la continuidad de estos ritos hasta la actualidad.
Un espacio destacado dentro de la muestra es la mesa de luz situada en la sala Tolsá, donde se exhibe una reproducción del fragmento de la predela Cristo Varón de los dolores, en la que se explican los significados de los Arma Christi, los artefactos sagrados asociados con el sufrimiento de Cristo, como la cruz, el manto de Verónica, el gallo de la negación y la inscripción INRI. Estos símbolos, que surgieron en la baja Edad Media, representan momentos clave de la Pasión y la victoria sobre la muerte.
La importancia del ciclo de la Pasión en el arte cristiano radica en que, desde la Edad Media, se convirtió en una forma primordial de representar la salvación de la humanidad. Esta conmemoración, que culmina en la Semana Santa, sobrepuso a festividades paganas y otras celebraciones, convirtiéndose en una de las representaciones religiosas más influyentes en la historia del arte.
En el contexto de la Nueva España, las representaciones de la Pasión cobraron una relevancia particular. Los misioneros, conscientes de la necesidad de evangelizar a los pueblos indígenas, utilizaron imágenes y representaciones teatrales para enseñar los principios del cristianismo. La falta de artistas europeos y la adaptación de los indígenas a estos nuevos modelos dio lugar a un estilo artístico único que fusionaba las tradiciones prehispánicas con los valores cristianos. Esta misma fusión se mantiene viva en las representaciones actuales de la Semana Santa en México, cuyas raíces se encuentran en los rituales de la Conquista.
Ritos y símbolos de la Pascua Cristiana es una invitación a reflexionar sobre el poder de las imágenes en la transmisión de valores espirituales y culturales. La exposición estará abierta al público del 10 de abril al 25 de mayo en el Museo Nacional de San Carlos, ubicado en la avenida México Tenochtitlán 50, colonia Tabacalera, alcaldía Cuauhtémoc, y constituye una oportunidad única para comprender cómo el arte ha sido un vehículo de enseñanza y de memoria histórica a través de los siglos.
Foto: Karla Gómez
Pie de foto: En el contexto de la Nueva España, las representaciones de la Pasión cobraron una relevancia particular.