El Chorro de Quevedo es uno de los espacios de interés cultural y turístico de la Candelaria

Isabel Nigenda Noticias 

Foto: Isabel Nigenda.Pie de foto: La plazoleta del Chorro de Quevedo. 

La plazoleta del Chorro de Quevedo, ubicado en el centro histórico de Bogotá, Colombia es uno de los espacios públicos de interés cultural y turístico de la Candelaria. Desde el Callejón del Embudo hasta llegar a la pila de piedra, la cual fue puesta en 1968, turistas y residentes gozan de una variada gama de colores que emergen de los murales que parecen cobrar vida en las voces de los vendedores que alardean de tener la mejor y la original chicha de maíz fermentado, la cual es considerada la bebida de los dioses indígenas. 

De acuerdo a datos históricos a principios de los años ochenta el Chorro de Quevedo era una plazuela bastante austera de paredes blancas, con un aspecto casi desolado por donde Su población flotante era bastante escasa, los vecinos se conocían entre sí y casi ninguna tienda se encontraba a su alrededor. Para entonces ya se había establecido en los anales de la historia bogotana que esta pequeña plazuela había sido el lugar de la primera fundación de Bogotá. Para rememorar este hecho, se escribió en piedra sobre el dintel de la fachada de una de las casas de la plazuela las fechas de fundación de la ciudad: la muy recordada y conmemorada del 6 de agosto de 1538 y la olvidada y totalmente desconocida del 27 de abril de 1539, fecha de la fundación legal de la ciudad en la Plaza de Bolívar. Este acto fue rechazado entonces por varios historiadores.

Precisamente, en la cúspide de los muros de este ilustre espacio urbano se encuentran las esculturas del escultor colombiano Jorge Olave, quien a mediados de 1990 desarrollo un trabajo escultórico en el barrio de La Candelaria. Son cerca 33 esculturas de tamaño natural las que yacen en balcones, techos y ventanas que realzan las dimensiones y las formas de las esculturas que conforman la exposición permanente. 

Igualmente, este espacio parece ser el punto de encuentro en el cual se dan cita enamorados, estudiantes, turistas que suelen disfrutar de postres como las obleas untadas con arequipe, mermelada de mora, lechera, queso, maní y entre otros ingredientes que conforman la lista de un variado menú.