Karla Gómez NOTICIAS
Con un programa vibrante que mezcla solemnidad, dramatismo y virtuosismo contemporáneo, la Orquesta Escuela Carlos Chávez (OECCh) ofrecerá un concierto gratuito el próximo fin de semana, el sábado 12 y domingo 13 de abril a las 13:00 h, en la Cancha de tenis del Complejo Cultural Los Pinos. Bajo la batuta del director invitado Emilio Aranda, esta joven agrupación del Sistema Nacional de Fomento Musical estará acompañada por más de 100 voces del Coro Sinfónico y el Ensamble Escénico Vocal, la soprano Nazarena Michelena y el violinista David Rivera Martínez, en un programa titulado Gloria in excelsis.
La primera obra que se interpretará será la imponente Obertura Festiva op. 96 del compositor ruso Dmitri Shostakovich, escrita en 1954 para conmemorar la Revolución de Octubre. Esta pieza, cargada de entusiasmo patriótico y exuberancia orquestal, fue concebida durante una etapa particularmente compleja de la vida del compositor, marcada por la vigilancia ideológica del régimen soviético. Shostakovich describió esta obra como el reflejo del ánimo de quien ha superado las pruebas de la guerra y se encuentra listo para reconstruir su nación. La Obertura, además, se volvió mundialmente famosa tras su interpretación en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Moscú en 1980.
En segundo lugar, se interpretará el Concierto para violín y orquesta del compositor mexicano Alexis Aranda, una pieza exigente dividida en tres movimientos: Colapso, Lamento y Anacronismo diabólico. Esta obra plantea un verdadero “duelo musical” entre el violín solista y la orquesta, con una escritura técnica compleja y dramática. El joven virtuoso David Rivera Martínez asumirá el reto de esta partitura, que explora desde paisajes sonoros desgarradores hasta pasajes de gran intensidad rítmica.
El programa concluirá con la emblemática Gloria de Francis Poulenc, una obra sacra compuesta entre 1959 y 1960, que combina elementos tradicionales con un enfoque profundamente personal y moderno. Escrita para soprano, coro y orquesta, esta pieza fue estrenada en Boston por la Orquesta Sinfónica local bajo la dirección de Charles Munch, y desde entonces se ha mantenido como una de las favoritas del repertorio coral-orquestal del siglo XX. Según el propio Poulenc, su inspiración para esta obra vino tanto de experiencias espirituales como de imágenes lúdicas, lo que confiere a la Gloria una sonoridad irreverente y profundamente humana.
Gloria in excelsis no solo representa una oportunidad para disfrutar de la excelencia de jóvenes músicos y voces en formación, sino también para sumergirse en tres universos sonoros muy distintos, que van de la exaltación soviética, al conflicto emocional contemporáneo, hasta la espiritualidad juguetona del siglo XX francés. La cita es en un espacio abierto y lleno de historia: el Complejo Cultural Los Pinos, que se consolida como un punto de encuentro entre la cultura, la memoria y el arte vivo.
Foto: Karla Gómez
Pie de foto: El programa concluirá con la emblemática Gloria de Francis Poulenc, una obra sacra compuesta entre 1959 y 1960.