Es una historia donde sus protagonistas se ven enfrentados a dilemas en nombre de un amor mal visto

Isabel Nigenda

Foto: Cortesía.
Pie de foto: “Conquistar a un duque”.

“Conquistar a un duque”, de Lenora Bell, es la más reciente publicación que realiza Editorial Planeta.

Según datos biográficos Lenora Bell, es autora galardonada y bestseller de novelas históricas, realizó un máster en Escritura Creativa en la Universidad de Portland. Ha vivido y enseñado inglés en los cinco continentes y, desde hace unos años, vive en Nueva Zelanda con su esposo y es autora también de “Desear a un duque”.

De acuerdo a la sinopsis del libro, Charlene es la hija fuera del matrimonio de un conde, lo que, lejos de haberla ayudado, la ha sentenciado a una vida de peligros y carencias. Sin embargo, se le presenta una oportunidad inesperada: James, duque de Harland, un atormentado heredero, está en busca de esposa, y por su increíble parecido físico ella debe suplantar a una de las candidatas, su media hermana legalmente reconocida, para lograr que el noble se comprometa. A cambio obtendrá el dinero que necesita para salir de problemas y su hermana menor tendrá un mejor futuro.

Trasladada junto con otras candidatas y sus madres a la mansión del duque, Charlene, convertida en lady Dorothea, se sumergirá en un peligroso juego de seducción que incluye apuestas sobre quién será la ganadora, noches a solas en la cocina, revelaciones, encuentros físicos y situaciones incómodas, junto a discusiones ardientes acerca del orden social y la moralidad imperante.

“Charlene apretó la mandíbula. Quizá ella se encontraba allí con un propósito más importante que hacerse del duque para su media hermana. Y aquel propósito estaba llorando entre sus brazos, desconsolada y falta de amor”, fragmento del libro.

“Conquistar a un duque”, es una historia donde sus protagonistas se ven enfrentados a dilemas tales como desafiar a la sociedad en nombre de un amor mal visto o cumplir con lo que se espera de ellos; apegarse a las apariencias o buscar, más allá de los apellidos, el cuerpo, la piel y el ser de quien se ha aprendido a amar.