En tanto, llegan unos 1,000 migrantes a las oficinas de la COMAR en busca de petición de asilo

Sergio García CORRESPONSAL / NOTICIAS

En el sureste mexicano llegaron unos 1,000 migrantes este lunes, originarios de Venezuela, Honduras, El Salvador, Guatemala y Haití. – Foto: Sergio García

Tapachula.- En el sureste mexicano en el estado de Chiapas, llegaron unos 1,000 migrantes este lunes, originarios de Venezuela, Honduras, El Salvador, Guatemala y Haití, en busca de la solicitud de asilo para iniciar su proceso y cruzar México.
Quienes advirtieron que no regresarán a sus países, porque vienen huyendo de la mala situación política, económica y de la falta de empleo, ya que su objetivo es llegar a los Estados Unidos.
Con tan solo 20 años, Alexander Vivar, migrante de Guatemala, ha detenido su paso en Tapachula, para tratar de solicitar un permiso en la puerta de entrada de México para seguir avanzando de manera legal, ya que de no lograrlo podría salir en grupos caminando.
“Nosotros ya estamos aquí, no podemos retroceder a nuestro país, sería en vano el esfuerzo, nada para atrás, nuestra visión es para adelante”.
Este joven, quien se dedicaba a realizar ventas en línea, aseguró que, en caso de México, le otorgará alguna facilidad se quedaría trabajando, sino lo intentará las veces que sea para poder llegar al norte y cruzar a los Estados Unidos.
Paralelamente, salió una nueva caravana de esta ciudad, unos 1,000 migrantes que decidieron salir caminando y abandonar el proceso ante las autoridades mexicanas, arriesgándose a los peligros para alcanzar llegar a la frontera norte.
El migrante de Venezuela, José Sánchez, llegó este lunes por la mañana a Tapachula y es el 1,097 en la lista para ser atendido por el personal de la COMAR, por lo que permanecerá un tiempo en espera de su proceso.
“No tengo idea cuando pasaré, pero espero que, al entrar, nos den una fecha para que podamos obtener nuestro permiso para seguir por México”.
Agregó que en cuanto tengan sus papeles van a empezar a caminar para poder empezar a salir de Chiapas y llegar al norte de México, porque su finalidad es poder llegar a los Estados Unidos para ayudar a sus familias que dejaron en Venezuela.
Este migrante, se dedicaba a la venta ambulante en las calles de Venezuela, pero la necesidad de sostener a familiares, lo obligó a salir caminando y llegar hasta Tapachula, ahora acompañado con cuatro compatriotas más.
En las oficinas de regularización migratoria del Instituto Nacional de Migración (INM), también se aglomeraron cientos de migrantes quienes ya han realizado su protocolo en la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), donde tramitarán sus visas por razones humanitarias.