La caravana de miles de migrantes que partirá este primero de julio solicitó al gobierno de México autobuses a través de un corredor humanitario hasta el estado de Nuevo León

Sergio García CORRESPONSAL / NOTICIAS

PIE DE FOTO. Jonathan Enrique Ávila, señaló que si es necesario pagar el combustible a los autobuses, estarían dispuestos a hacerlo todos con tal de evitar más riesgos en su tránsito. Foto. Sergio García

Tapachula- Para evitar una tragedia, los peligros y accidentes como los que sufrieron los más de 50 migrantes que fallecieron al interior de un tráiler en San Antonio Texas, la caravana de miles de migrantes que partirá este viernes primero de julio solicitó al gobierno de México autobuses a través de un corredor humanitario hasta el estado de Nuevo León.
Este nuevo grupo de extranjeros, señaló, llevan consigo unas 400 mujeres embarazadas y mil niños que transitarán por la carretera costera con el fin de llegar a la aduana migratoria de Huixtla.
Jonathan Enrique Ávila, migrante de Venezuela, señaló que si es necesario pagar el combustible a los autobuses, estarían dispuestos a hacerlo todos con tal de evitar más riesgos en su tránsito, porque en este nuevo éxodo estimó que podrían caminar unas 8 mil personas de los países de Venezuela, africanos,chilenos, haitianos, chinos, árabes e incluso mexicanos.
«Nosotros estamos pidiendo a las autoridades mexicanas que nos resguarden en las carreteras que vayan con nosotros en todo momento porque es una marcha – caravana pacífica».
Este migrante se solidarizó y lamentó la muerte de las personas que fallecieron en el tráiler que también llevaba el sueño de los migrantes latinoamericanos, Centroamericanos y de otros países que buscaban llegar a los Estados Unidos.
El migrante de Venezuela, Hilbert Silva, exigió a las autoridades mexicanas que respeten sus derechos humanos y los dejen transitar libremente, porque no buscan quedarse en territorio nacional.
“Lo que necesitamos nosotros es salir de Tapachula, porque todos estamos durmiendo en el suelo debajo del techado del parque, donde hay niños y mujeres enfermas”.
Su compatriota, Víctor Arenas, confirmó que la marcha caravana no se va a detener, “ahora podemos ser mil o dos mil pero el viernes se incrementará el número de personas que requieren sus documentos para llegar a los Estados Unidos”.
Al parque Bicentenario, principal lugar de las caravanas, están concentrándose las personas migrantes para salir caminando ya que no encontraron la agilidad en sus trámites para obtener sus permisos temporales de viaje.
Otros grupos de migrantes han entregado sus identificaciones en las oficinas de regularización migratoria del Instituto Nacional de Migración (INM), porque han confiado que les pueden entregar permisos temporales de 30 días para transitar por territorio nacional y no ser parte de esta caravana de migrantes.