Daniela Grajales / NOTICIAS

Foto: René Araujo – Materiales de mala calidad utilizan constructoras para la reconstrucción de casas en el Ejido Lázaro Cárdenas.

Afectados por el terremoto de 2017 dieron a conocer que la reconstrucción de sus viviendas no es de buena calidad, y es que los afectados del terremoto del pasado 7 de septiembre del 2017, aún no concluyen de ver su patrimonio.

De acuerdo a los testimonios de los “beneficiados” las constructoras que llegaron a la colonia Lázaro Cárdenas del municipio de Cintalapa, están haciendo mal el trabajo, por lo que piden a la Promotora de la Vivienda Chiapas (Provich), supervise las obras que están realizando en dicha colonia.

Son al menos 60 afectados que han expuesto el material que están utilizando, “los muros son de Block hueco y poroso, que las columnas son armadas con armex de 8 cm, y que además la obra carece de trabes para soporte de carga, las losas están armadas únicamente con malla de baja calidad”. Ante esto dicen temer que un día colapsen.

En presencia de ingenieros civiles y maestros albañiles del ejido, comentaron que si se corre riesgos de fracturas y/o daños estructurales importantes en cualquier movimiento telúrico que llegara a pasar.

Los dueños de las viviendas piden que la construcción se haga bien, tomando en cuenta que esta región del estado es altamente sísmica y si el material que se ocupa es débil, por lo tanto la casa quedaría insegura.

Lo peor de esto, es que los propios albañiles que trabajan en esas obras reconocen que el material que están utilizando es de muy mala calidad, y aclaran que no se hacen responsables si algo malo llegara a pasar después, ya que las constructoras que fueron contratadas por la dependencia estatal les ordenó trabajar con eso, sin tomar en cuenta la durabilidad de las viviendas.

Los dueños de las casas en construcción aseguran que si no se mejora la calidad de los materiales, no van a aceptar nada y por consecuencia no firmarán los documentos de entrega de obra, porque ellos quieren que se haga algo que se agradezca y que dure muchos años, “no casas desechables”.