Los municipios del estado que cuentan con esta insignia son Chiapa de Corzo, San Cristóbal de Las Casas, Comitán y Palenque
Carlos Sánchez NOTICIAS
Pese a que en 2019 no se contempló en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) a los más de 100 pueblos mágicos del país, Chiapas continúa registrado con cuatro de ellos, esto de acuerdo al portal de la Secretaría de Turismo Federal.
Sin embargo, fue hasta en el PEF de 2022 cuando los pueblos mágicos recuperaron su presupuesto, el cual asciende a 500 millones de pesos.
Los municipios del estado que cuentan con esta insignia son Chiapa de Corzo, San Cristóbal de Las Casas, Comitán y Palenque.
El primero en obtener su registro fue San Cristóbal de Las Casas en el 2003, posteriormente Chiapa de Corzo y Comitán en el año 2012, mientras que el último en participar en el programa fue Palenque a partir de 2015.
El reconocimiento de pueblo mágico a un municipio se da cuando la demarcación resalta los factores como su identidad cultural que pueden ser historia, arquitectura, gastronomía o artesanías.
En tanto los municipios que aspiren a incorporarse al programa de pueblos mágicos, deben cumplir requisitos de aspecto social y económico, institucional, de gobierno y turístico.
Por ejemplo, deben poseer un centro de información turística en el municipio, así como elementos de identidad cultural y estar ubicados a menos de dos horas de un centro turístico conocido o de una gran urbe.
Es importante mencionar que de acuerdo con el ‘Diagnóstico de la evolución y perspectivas de los Pueblos Mágicos’, no todos los municipios cumplen con todos los requerimientos para tener el citado estatus, ya que varios presentan problemas de inseguridad, tráfico de influencias, además de presentar insuficientes productos turísticos.
Desde la creación del programa «Pueblos Mágicos» en el año 2001, a la fecha son 132 municipios los que cuentan con este reconocimiento, el cual aporta diversos beneficios como acceso a incentivos federales y estatales, rescate de sus monumentos para el rescate de la imagen urbana, pues se pintan las fachadas de las casas y se capacita a la población para detonar la comercialización y producción.
