25 años de su legado poético, su recuerdo resuena con más fuerza que nunca en los corazones de los amantes de la literatura

Karla Gómez NOTICIAS

En este año marcado por el vigésimo quinto aniversario luctuoso del poeta chiapaneco Jaime Sabines, su recuerdo resuena con más fuerza que nunca en los corazones de los amantes de la literatura. Nacido el 25 de marzo de 1926 en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, Jaime Sabines dejó una huella en la poesía mexicana y en el corazón de aquellos que han sido tocados por su obra.
Hijo de Julio Sabines, un hombre de origen libanés y Luz Gutiérrez, Jaime creció inmerso en la rica tradición oral de su familia, donde las historias y cuentos eran una parte fundamental de su infancia. Desde temprana edad, mostró un interés innato por la poesía, influenciado por las lecturas que compartía con su hermano Juan y las enseñanzas de su madre.
A los 16 años, un concurso estudiantil de poesía cambió el rumbo de su vida. Aunque los versos ganadores habían sido escritos por su hermano Jorge, este hecho despertó en Jaime el deseo de escribir por sí mismo. Así comenzó su viaje en el mundo de las letras, un viaje que lo llevaría a convertirse en uno de los poetas más importantes de su generación.
Su llegada a la Ciudad de México en 1945 marcó el inicio de una nueva etapa en su vida. Aunque inicialmente estudió medicina, pronto descubrió que su verdadera pasión residía en las letras. En la soledad de su cuarto de alquiler, Sabines se sumergió en la lectura de grandes autores y comenzó a escribir frenéticamente. Fue durante este período cuando nació su primer libro, «Horal» (1950), el cual marcaría el inicio de una prolífica carrera literaria.
A lo largo de los años, Sabines continuó escribiendo y publicando poemas que capturaban la esencia misma de la vida y la humanidad. Su estilo directo y transparente, combinado con una profunda sensibilidad hacia los temas del amor, la muerte y la existencia, lo convirtieron en un poeta querido y admirado por muchos.
A pesar de su éxito literario, Sabines nunca perdió su conexión con su tierra natal. Pasaba sus días entre su rancho en Chiapas y la bulliciosa Ciudad de México, donde seguía siendo una figura querida y respetada en el mundo de las letras.
Su muerte el 19 de marzo de 1999 dejó un vacío en el corazón de sus seguidores, pero su legado continúa vivo en cada uno de sus versos. En este aniversario luctuoso, recordamos y celebramos la vida y obra de Jaime Sabines, un poeta que supo capturar la belleza y la complejidad del alma humana como pocos lo han hecho antes y después de él.

Foto: Cortesía
Pie de foto: Nacido el 25 de marzo de 1926 en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, Jaime Sabines dejó una huella en la poesía mexicana.