La música clásica, un arte atemporal
Isabel Nigenda
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El pasado 3 de marzo, la Orquesta Sinfónica de Chiapas ofreció un concierto que cautivó a los asistentes del Teatro de la Ciudad Emilio Rabasa, bajo la dirección de la directora invitada Esmireli Dorame.
Con la interpretación de obras de Beethoven, Mozart y Elgar, la Orquesta Sinfónica de Chiapas, bajo la batuta de Dorame, logró llevar a los espectadores a través de una experiencia musical única, llena de contrastes y sentimientos.
En una entrevista posterior al concierto, Esmireli Dorame explicó su concepción de la música clásica como un museo musical, donde se pueden traer al presente obras de hace dos siglos para ser apreciadas por el público actual.
Sin explicaciones previas ni micrófonos ambientales, la directora de orquesta cumplió con su objetivo de transmitir el sentido de cada pieza, permitiendo que el público tuviera un acercamiento directo con las obras musicales.
El concierto culminó con la interpretación de la «Primera de Beethoven», una de las sinfonías más emblemáticas del compositor alemán, dejando al público emocionado y satisfecho.
Este concierto dirigido por Esmireli Dorame, demuestra la importancia de la música clásica como una forma de arte atemporal capaz de emocionar y conectar con el público de todas las épocas.
Así mismo, durante la entrevista, Dorame compartió parte de su historia personal y como persiguió su sueño de convertirse en directora de orquesta.
Dorame comenta que decidió ser música cuando tenía 12 años, edad en la que inicio con lecciones de piano y a los 15, por un giro inesperado empezó a tocar el clarinete en una banda juvenil del estado.
“Cuando estaba en esa banda veía al director de esa banda y me preguntaba que tengo que hacer para estar en ese lugar, ya que quería ser la que dice como quiero que suene una pieza y cuando entraba cada instrumento pero estaba muy chica”, menciono.
Aquel sueño la llevo a mudarse de ciudad para comenzar sus estudios musicales. Una vez que culmino la licenciatura en piano en la Universidad de Sonora, se quedo por cerca de tres años en el ámbito laboral hasta que decidió continuar con sus estudios y no parar hasta alcanzar sus anhelos por lo que decidió estudiar dirección orquestal.
Los ideales de Esmireli Dorame sigue en progreso y en búsqueda de acumular diversas experiencias, las cuales busca le permitan tener la titularidad de una orquesta.
