Jhonatan González NOTICIAS

Más de 700 personas de las comunidades El Carmen y La Esperanza del municipio de Pantelhó, Chiapas, huyeron de sus hogares desde el pasado 18 de abril, tras la ola de violencia que generan los grupos armados en esa zona de los Altos, aseguró Reynaldo Pérez Pérez, defensor de derechos humanos.
El desplazamiento forzado de las 240 familias se registró luego de que el 16 de abril hombres encapuchados y armados, bloquearon los accesos a la cabecera municipal, provocando una balacera que dejó en medio a profesores de al menos diez escuelas, así como a la población civil.
En entrevista el también activista, recordó que la demarcación permaneció sitiada por 72 horas, situación que se extendió a las comunidades limítrofes con Chenalhó y que además provocó la suspensión de las clases hasta el día de hoy.
“Las problemáticas que han estado pasando en Pantelhó también afecta físicamente, psicológicamente a los habitantes de Chenalhó, detrás de mí están las mujeres, niños y ancianos que están en alta vulnerabilidad y de altas violaciones a los derechos humanos”, puntualizó.
Martha Gutiérrez Gutiérrez descendiente de la etnia maya tzotzil, relató que cuando las detonaciones de arma de fuego se incrementaron, su familia decidió correr hacia las montañas para intentar ponerse a salvo y posteriormente buscar refugio con amigos y familiares de otras comunidades.
“Los disparos empezaron como a las 6 de la mañana, más o menos, empezaron los disparos de Pantelhó, entonces fue ahí cuando estábamos desayunando salimos huyendo con los niños, los niños salieron sin zapato, descalzos, empezamos a correr por los disparos que había, mucho tiroteo en la línea por eso salimos hasta acá en este lugar”, detalló.
Las familias desplazadas se encuentran distribuidas en cuatro puntos del municipio de Chenalhó, ahí son los propios habitantes quienes se han solidarizado con alimentos y ropa, pues todas sus pertenencias las dejaron en el abandono, así como sus animales de corral que utilizaban para sobrevivir la pobreza.
“Pedimos a las autoridades ayuda humanitaria, comida, alimentación, cobija y todo lo necesario, porque no podemos salir a conseguir trabajo ni a conseguir comida en otras partes, tenemos miedo, por eso aquí mismo hacemos nuestra comida y aquí dormimos en este mismo lugar”, expuso.
Por su parte Rosalinda Gómez Santiz, también víctima de desplazamiento, señaló que temen salir a la calle debido a que los hombres armados los han amenazado en reiteradas ocasiones.
“Estamos en otra casa porque no hay seguridad todavía, no sabemos si va a parar los disparos (…) Mal, estoy triste porque no es igual como que estás en tu casa (…) Sí abandonado, porque en mi casa se quedó todo, también mis pollitos, todo lo que tenemos”, puntualizó.
Hasta el momento las clases están suspendidas al igual que los servicios médicos. La situación que viven es de terror, debido a que las víctimas de desplazamiento duermen en el piso apenas con una cobija y en una galera antigua preparan sus alimentos.

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Más de 700 personas de las comunidades El Carmen y La Esperanza del municipio de Pantelhó, huyeron de sus hogares desde el pasado 18 de abril.
Foto: Jhonatan González