Karla Gómez NOTICIAS

El Centro Nacional de las Artes (Cenart) se transformó en una auténtica fiesta cubana con la primera noche del concierto “Legado Buenavista Social Club”, un homenaje entrañable encabezado por Ibrahim Ferrer Jr. en honor al icónico colectivo musical que marcó la historia del son cubano.
Ante un Auditorio Blas Galindo con localidades agotadas, Ferrer Jr., hijo del legendario Ibrahim Ferrer Planas, ofreció un espectáculo de hora y media lleno de ritmo, nostalgia y emoción. Acompañado de su orquesta y un grupo de bailarines, interpretó clásicos que llevaron al público por un recorrido vibrante de géneros como el son, cha cha cha y bolero.
Temas como Contigo aprendí, La negra Tomasa y Quizás, quizás, quizás —esta última en dueto con Esther Leal— abrieron paso a las piezas más emblemáticas de la Buena Vista Social Club: El Carretero, Ay, Candela, Chan chan y El cuarto de Tula, que encendieron el ánimo del público, muchos de los cuales no resistieron la tentación de ponerse a bailar.
“El mismo amor que nos dan es el que sentimos por ustedes”, expresó Ferrer Jr. entre aplausos, agradeciendo la calidez del público mexicano, que respondió con ovaciones tras cada interpretación.
La banda que acompañó al cantante estuvo conformada por Geovanis Alcántara (dirección musical y piano), Jorge Víctor González (baby bass), Joselyn Rodríguez González (percusión cubana), Eduardo Ramos (timbales y batería), Hugo Wilson (trompeta), Dinza Ges (trombón), Jorge Leliebre (flauta) e Ingrid Castro (coros).
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue la aparición en escena de una fotografía del padre de Ferrer Jr., dispuesta en un altar, así como la participación de su hija Liz Ferrer, quien también formó parte de los coros. Fue ella quien interpretó Me siento bien, canción popularizada por Nina Simone, pero que esa noche resonó con el alma del son cubano. “Así empezó el Social Club. Y ahora a ella le toca mantener este legado de la música cubana”, afirmó Ferrer Jr., en una clara declaración de continuidad generacional.
Con esta presentación, la primera de dos fechas con entradas agotadas, Ibrahim Ferrer Jr. no solo celebró la herencia de la Buena Vista Social Club, sino que confirmó que la música cubana sigue viva, vigente y universal.
Foto: Karla Gómez
Pie de foto: Un homenaje entrañable encabezado por Ibrahim Ferrer Jr. en honor al icónico colectivo musical que marcó la historia del son cubano.