En México, el 70% de la población ocupada labora en la informalidad, lo que limita el acceso a créditos y apoyos gubernamentales

Luis Vallejo NOTICIAS

No estar registrado ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) ni contar con un Registro Federal de Contribuyentes (RFC) no significa que una persona no pague impuestos, pero sí implica perder incentivos fiscales y programas de apoyo para emprendedores y pequeños empresarios, advirtió Sandra Luz Carvajal Magaña, presidenta de la Academia de Derecho Fiscal del Estado de Chiapas.
“Todos pagamos impuestos. Por ejemplo, cuando compras un par de zapatos y no pides factura, dentro del precio ya está incluido el IVA, que la empresa debe enterar al SAT. El problema es que, al no formalizarse, las personas se privan de beneficios como el acceso a créditos o apoyos de la Secretaría de Economía”, explicó.
De acuerdo con datos nacionales, alrededor del 70% de la población ocupada se encuentra en la informalidad, lo que impacta en la recaudación y en el desarrollo económico. Carvajal Magaña destacó que, desde la pandemia, ha aumentado el interés de personas físicas y morales por regularizar su situación fiscal, en parte debido a las acciones de la autoridad para identificar ingresos no declarados.
La especialista recomendó a quienes deseen incorporarse al régimen formal acudir al SAT o buscar asesoría de profesionales registrados en colegios o asociaciones reconocidas, ya que estas organizaciones cuentan con mecanismos de supervisión para garantizar la calidad del servicio.
“La informalidad no solo afecta de manera global a la economía del país, sino que perjudica directamente a quien la practica, porque limita su acceso a financiamientos, apoyos y mecanismos de crecimiento empresarial”, dijo para finalizar.

Foto: Luis Vallejo

Pie: Recomiendan a quienes deseen incorporarse al régimen formal acudir al SAT o buscar asesoría de profesionales registrados en colegios o asociaciones reconocidas.