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PIE DE FOTO: Entre las dos atletas sumaron 5 medallas, una más que el año pasado para este club chiapaneco FOTOS: NEIN GÓMEZ

Antes del viaje a Baja California, los objetivos para Acuática Master Center, con los Juegos Nacionales CONADE 2022 eran claros: superar las 4 medallas del 2021. La meta se cumplió y con las atletas Daniela Espinosa y Ana Camila Rodríguez Suriano se trajeron de regreso a tierras chiapanecas un total de 5 preseas, 2 oros, 1 plata y 2 bronces.
Una vez de regreso a su casa de entrenamiento, Club Acuática Master Center, Daniela y Ana Camila platicaron en entrevista un poco de lo vivido en estos Juegos CONADE para ellas, así como los retos que ahora les deja el regresar como medallistas de este certamen, en su edición 2022.
Daniela Espinosa
“Fue una experiencia muy linda y de las mejores a nivel nacional, porque aparte de los resultados, tuve un respaldo de mis compañeros y estoy feliz por los resultados que se obtuvieron. Mis objetivos era bajar mis tiempos, esperaba una medalla, pero no tres, igual quedé algo sorprendida y regreso con las metas de mejorar mis tiempos y clasificar a eventos como Panamericanos”.
Este fue el sentir de Daniela, como primera experiencia de Juegos CONADE para ellas, la cual también le hizo pasar por varias emociones, como ella misma explica, “las emociones no puedo explicarlas, porque cuando vi el tablero con mi nombre tenía ganas de llorar, de gritar, de todo; fue una experiencia muy bonita por estar representando a Chiapas”.
Para esta jovencita sus sueños aún empiezan así que ya trabaja de la mano de su entrenador para seguir dando resultados, “siento que puedo llegar a hacer más cosas y esto ayudó a motivarme para tener más objetivos, y seguir entrenando todos los días. Esto es un trabajo duro, de constancia y de todos los días con mi entrenador, porque como dice, lo difícil no es llegar, sino mantenerse”.
Primordialmente, Daniela dedicó el logro de las 3 medallas a sus padres y el resto de su familia, así como todo el apoyo que le ha brindado su club, Acuática Master Center.
Ana Camila Rodríguez Suriano
A diferencia de su compañera de equipo, Ana Camila iba a estos juegos como una de las experimentadas, aunque revela que fue un año sinuoso, por otros imponderables que se cruzaban en su plan de entrenamiento, regresa con la meta cumplida de estar en pódium un año más en Juegos CONADE.
“Es el resultado de todo el esfuerzo, de las horas de entrenamiento y del desgaste físico y psicológico, e incluso lo del estrés escolar que puede afectar lo deportivo, pero al final se logró el resultado esperado y me deja mucho aprendizaje para lo que serán los juegos siguientes, esperando traer mejores resultados y espero seguir en el pódium en los años que me queden en esta competencia”, explica.
Además, asegura, “este año fue movido, por los entrenamientos que tenía que estar constantes, por la competencia que se aproximada, modificaciones fechas que pueden desbalancear el plan de trabajo, pero pese a ello, se logró hacer un buen papel”.
Conforme ella avanza de categorías sabe que la responsabilidad es más, no sólo como atleta, pero ella misma se traza el objetivo de no bajar la guardia para futuras competencias, “me impone a seguir y estar constante a mis pruebas, donde saco buenos resultados, a estar ahí y no bajar la guardia; porque siempre saldrán nuevos talentos, que se preparan bien o simplemente atletas que llegan y nacen con el talento, la competencia y la exigencia crece, sobre todo en lo personal, porque acá soy una imagen a seguir en el club, pero lo tomo para motivar a los demás”, dijo.
Así mismo, el sueño de regresar a ser seleccionado nacional sigue intacto, “siempre habrá oportunidad para estar en selección mexicana. Este año no se logró por el problema del comité estabilizador y la federación, lo que hizo que sólo fuera a un evento y al no estar avalado no pude clasificar a otro internacional, pero siempre hay opción y no se descarta la posibilidad y es para lo que entreno”.
Finalmente, Ana Camila hace partícipe de sus dos medallas aquellas personas que tuvieron fe en ella, dando prioridad a sus padres, a su entrenador Alonso Cristiani; que jamás la ha dejado caer, así como a su club Acuática Master Center y sus compañeros de equipo.