NEIN GÓMEZ NOTICIAS
En un certamen que ha puesto en el escaparate a las nuevas promesas del deporte continental, la dupla mexicana de tenis femenil, integrada por Hanne Estrada y Marianne Ángel, ha dejado un mensaje claro: el futuro de la raqueta en el país es prometedor. Las jóvenes tenistas se colgaron la medalla de plata en la modalidad de dobles de los Juegos Panamericanos Junior 2025 de Asunción, Paraguay, tras un vibrante partido que mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos.
El camino de las mexicanas hacia la final fue una demostración de garra y compenetración. Con un tenis sólido, caracterizado por golpes potentes desde el fondo de la cancha y una sincronización casi perfecta, Estrada y Ángel fueron dejando rivales en el camino hasta plantarse en el duelo por el metal dorado. La cita decisiva tuvo lugar en la cancha central del Rakiura Resort, donde se vieron las caras con la pareja argentina de Sol Larraya y Candela Vázquez.
El encuentro fue un auténtico choque de trenes que culminó con un ajustado marcador de 0-6, 6-2 y 10-6 a favor de las raquetas albicelestes. A pesar de un inicio arrollador de las mexicanas, que se adjudicaron el primer set con un contundente 6-0, las argentinas mostraron una resiliencia envidiable, ajustaron su estrategia y consiguieron darle la vuelta al marcador en los sets siguientes, llevándose el oro en un final cardiaco.
A pesar de la derrota, la medalla de plata de Hanne Estrada, originaria de Veracruz, y de Marianne Ángel, proveniente de Chiapas, representa un hito importante. Este logro subraya el trabajo de formación en el tenis juvenil mexicano y demuestra el potencial de una generación que viene empujando fuerte.
Para Marianne Ángel, en particular, esta presea tiene un sabor especial, ya que marca la tercera medalla para la delegación chiapaneca en estos Juegos, sumándose al oro de Naomi Aguilar en Tiro con Arco y al bronce de María Fernanda Cruz en Judo. Con cada paso que dan, estas jóvenes atletas no solo escriben su propia historia, sino que también inspiran a las futuras generaciones a soñar en grande.
PIE DE FOTO: Para Marianne Ángel, en particular, esta presea tiene un sabor especial, ya que marca la tercera medalla para la delegación chiapaneca en estos Juego.
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