NEIN GÓMEZ NOTICIAS

En una final que rompió todos los pronósticos y quedará grabada en la memoria colectiva, el equipo de San Juditas San Cristóbal se alzó con el título del Campeonato Estatal de Futbol de Bochil, tras propinar una apabullante goleada de 7-1 al favorito Deportivo Tío Rocky. La Unidad Deportiva de Bochil fue testigo de una noche de contrastes, donde la ilusión local se desvaneció ante la contundencia y el hambre de triunfo de un rival que supo aprovechar cada circunstancia del juego.
El partido, que prometía un duelo de alto calibre entre dos de los mejores equipos del torneo, tomó un giro dramático y definitivo al minuto 10. Deportivo Tío Rocky, que buscaba imponer su condición de local y su estilo ofensivo, se encontró con una cuesta arriba cuando Francisco Mata vio la tarjeta roja directa por una entrada temeraria en el mediocampo. Esta expulsión tempranera dejó a los bochilenses con un hombre menos y abrió las compuertas para un San Juditas que no perdonó.
Con la superioridad numérica a su favor, el equipo de San Cristóbal se adueñó del partido. El ataque de San Juditas se mostró implacable, aprovechando los espacios generados y los errores de una defensa desorganizada y golpeada anímicamente. La figura de la noche, sin lugar a duda, fue el delantero Jonathan Ramos, quien tuvo una actuación de ensueño. Con cuatro goles en su cuenta personal, Ramos se erigió como el verdugo del Deportivo Tío Rocky, liquidando cualquier esperanza de reacción.
La fiesta de goles se completó con la destacada labor de Omar, quien con un triplete brillante selló la goleada. La dupla ofensiva de San Juditas funcionó a la perfección, con una sinergia que les permitió encontrar constantemente los huecos en la zaga rival, la cual no pudo reponerse ni emocional ni tácticamente de la expulsión.
El único destello de alegría para la afición local llegó en el segundo tiempo, gracias a Jorge «Piña» Coello, quien con un potente disparo cruzado descontó para el Deportivo Tío Rocky. Sin embargo, el gol fue insuficiente ante un adversario que mantuvo el control, la intensidad y la concentración hasta el pitazo final.
El triunfo de San Juditas San Cristóbal no solo significa la conquista del campeonato estatal, sino que también deja un mensaje claro para el futbol chiapaneco: la disciplina táctica y la capacidad para capitalizar las oportunidades pueden más que cualquier pronóstico. El equipo campeón cimentó su victoria en una defensa sólida, un mediocampo creativo y una delantera letal, convirtiéndose en un digno referente para las próximas ediciones del certamen.
Al finalizar el encuentro, el cuerpo técnico de San Juditas resaltó la preparación previa y la concentración de sus jugadores como factores clave. «Supimos leer el partido y aprovechamos cada opción que se nos presentó, sin confiarnos en ningún momento», afirmó el entrenador, en medio de la euforia por levantar el trofeo.
Por su parte, Deportivo Tío Rocky, aunque derrotado, se marchó con la frente en alto. A pesar de una noche amarga, su campaña fue notable y les permitirá regresar con más fuerza el próximo año. El silbatazo final en Bochil no solo selló una noche histórica para San Juditas, sino que también fue una lección de que, en el futbol, nada está escrito hasta el final.
PIE DE FOTO: El triunfo de San Juditas San Cristóbal no solo significa la conquista del campeonato estatal, sino que también deja un mensaje claro para el futbol chiapaneco: la disciplina táctica y la capacidad para capitalizar las oportunidades pueden más que cualquier pronóstico.
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