Karla Gómez NOTICIAS
En un vibrante encuentro entre la comunidad artística y estudiantes ávidos de conocimiento, la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda ha sido el epicentro de una conversación enriquecedora sobre la función del arte en la contemporaneidad. En el marco del programa «Taller de Artista Invitado», el pasado 24 de abril, tuvimos el privilegio de recibir a Mauricio Alejo, un prolífico artista cuya obra trasciende fronteras y se sumerge en la esencia misma de la realidad.
Mauricio Alejo, nacido en la Ciudad de México en 1969, nos abrió las puertas de su fascinante universo creativo durante una cautivadora plática realizada en las instalaciones de la prestigiosa institución del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) y la Subdirección General de Educación e Investigación Artísticas (SGEIA). Con humildad y pasión, el artista compartió los intrincados caminos que lo llevaron a fusionar la fotografía y la escultura en una expresión artística única y conmovedora.
«Empecé como artista autodidacta», confesó Alejo, remontándose a sus inicios en los noventa, una época en la que su creatividad no conocía límites ni reglas predefinidas. Sin embargo, fue su inquietud por la fotografía lo que marcó un punto de inflexión en su carrera, dotando a su obra de un carácter más profundo y documental. Desde entonces, su arte ha sido exhibido en reconocidos espacios tanto nacionales como internacionales, como el Centro de la Imagen, el Museo Rufino Tamayo y el prestigioso Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía en España.
Residente en la Universidad Nacional de Singapur para proyectos de sitio específico, Alejo ha sido testigo del impacto de su trabajo en el ámbito artístico, aunque también ha sentido la llamada de explorar la intersección entre el arte y la inteligencia artificial. Sus imágenes e instalaciones, ancladas en la realidad pero permeadas de una poesía visual única, exploran la fugacidad de la existencia y los intercambios entre el mundo tangible y la noción misma de imagen.
«En mi trabajo hay una afinidad emocional hacia los objetos», revela Alejo, destacando la influencia del yo en cada una de sus creaciones. Su obra, en constante evolución, ha sido merecedora de prestigiosas becas del Fonca y la Fundación de Nueva York para las Artes, consolidándolo como una figura imprescindible en el panorama artístico contemporáneo.
La charla con Mauricio Alejo en La Esmeralda no solo nos sumergió en el fascinante proceso creativo de un artista excepcional, sino que también nos invitó a reflexionar sobre el papel del arte en nuestra sociedad y su capacidad para desvelar las complejidades del mundo que habitamos. Sin duda, una experiencia inspiradora que quedará grabada en la memoria de todos los presentes como un testimonio del poder transformador del arte.
Foto: Cortesía
Pie de foto: Conferencia con Mauricio Alejo en La Esmeralda.