Buscó entender cómo las personas encontraban lo espiritual o lo sagrado en sus vidas cotidianas durante la contingencia sanitaria
Karla Gómez Noticias
En medio de la incertidumbre y la adversidad que marcó la pandemia de COVID-19, el artista neoleonés Ismael Martínez González se sumergió en un proyecto artístico profundamente introspectivo. Bajo el título «Inefable-Mostrar lo que no se puede narrar», Martínez González buscó entender cómo las personas encontraban lo espiritual o lo sagrado en sus vidas cotidianas durante la contingencia sanitaria. A través de una serie de 12 pinturas al óleo de mediano formato, el artista plasmó las historias recopiladas de individuos que enfrentaron situaciones de riesgo y desafíos durante estos tiempos turbulentos.
En una entrevista exclusiva, Martínez González compartió la génesis y la esencia de su proyecto. Explicó que, a medida que recopilaba relatos de personas que enfrentaron el encierro, la pérdida de negocios, la enfermedad o la agonía de seres queridos, notó un denominador común: la búsqueda de una conexión con algo más allá de lo tangible. «La idea era que la experiencia de sus relatos cumpliera con esas características en la búsqueda de una salida ante una situación de crisis mediante algo espiritual -por decirlo de alguna forma-, buscar ese consuelo, ese refugio, la solución de una situación que enfrentan», señaló el artista.
Para capturar la esencia de estas narrativas, Martínez González optó por expresarlas visualmente en lugar de limitarse al relato oral. Observó que en las entrevistas predominaba el uso de comparaciones y metáforas, ya que las experiencias espirituales eran difíciles de explicar objetivamente. «Se siente como…», «huele como…», «yo sentí como que el espacio…», fueron algunas de las expresiones recurrentes que transformó en imágenes a través de su arte.
El proyecto, concebido en respuesta al creciente interés por temas metafísicos durante la pandemia, refleja también la observación de Martínez González sobre el aumento del consumo de contenido espiritual en internet y la adaptación de las prácticas religiosas al mundo digital. Desde transmisiones en vivo de lecturas de la suerte hasta servicios religiosos transmitidos en línea, el artista notó cómo las personas buscaban consuelo, esperanza y protección en estas «soluciones espirituales».
Sin embargo, el interés de Martínez González por explorar lo sagrado y lo trascendente no es nuevo. Desde sus inicios, el artista ha abordado temas relacionados con la espiritualidad en su obra. La observación de patrones recurrentes en momentos de crisis lo llevó a profundizar en la noción de hierofanía, concepto definido por el filósofo e historiador de las religiones Mircea Eliade como la manifestación de lo trascendente en lo cotidiano.
Originario de Apodaca, Nuevo León, Ismael Martínez González inició su carrera artística centrado en autorretratos, utilizando esta forma de expresión para capturar las emociones y las experiencias vividas. A medida que la pandemia desencadenaba miedo, frustración y estrés en la sociedad, el artista se sumergió en una investigación personal para comprender el porqué detrás de la creciente inclinación hacia prácticas espirituales en tiempos de crisis.
Las obras creadas en el marco del proyecto «Inefable-Mostrar lo que no se puede narrar» fueron expuestas en la zona metropolitana de Monterrey, gracias al apoyo del Programa de Estímulo a la Creación y Desarrollo Artístico (PECDA) Nuevo León 2022. A través de su arte, Ismael Martínez González invita al espectador a reflexionar sobre la búsqueda de lo sagrado en medio de la adversidad, ofreciendo una ventana a la espiritualidad como fuente de consuelo y esperanza en tiempos difíciles.
Foto: Cortesía.
Pie de foto: La espiritualidad en tiempos de pandemia.