Este trabajo permitirá generar nuevos conocimientos sobre las civilizaciones y culturas que florecieron en el sureste mexicano

Isabel Nigenda Noticias

Con un avance del 99.7 por ciento, las labores de salvamento arqueológico en el Tramo 6 del Tren Maya están próximas a su conclusión. Este tramo, que conectará las ciudades de Tulum y Chetumal en Quintana Roo, ha sido objeto de una extensa investigación llevada a cabo por la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
En la conferencia matutina presidida por Andrés Manuel López Obrador, el director general del INAH, Diego Prieto Hernández, informó que se han otorgado los permisos de obra para los tramos 1, 2, 3, 4, 5 y 7 de la línea férrea, mientras que el Tramo 6 se encuentra casi finalizado.
El proyecto del Tren Maya ha brindado una oportunidad única para realizar una investigación arqueológica de gran envergadura en la historia de México. Según Prieto Hernández, este trabajo permitirá generar nuevos conocimientos sobre las civilizaciones y culturas que florecieron en el sureste mexicano, así como comprender la diversidad lingüística, social, geográfica y económica de la antigua nación maya.
El antropólogo destacó la labor conjunta de diversos especialistas en arqueología, así como la colaboración del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), la Secretaría de la Defensa Nacional y los consorcios constructores, entre otras entidades. Estos esfuerzos han contribuido a la recuperación del patrimonio arqueológico tanto en la construcción del Tren Maya como en el desarrollo del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), el cual busca mejorar la visita pública, la investigación y la conservación de 26 sitios cercanos a la ruta del tren.
Hasta la fecha del 22 de junio de 2023, se han registrado y preservado un total de 53,568 bienes inmuebles, incluyendo basamentos, albarradas, nivelaciones, cimientos y unidades habitacionales. Además, se han recuperado 1’111,608 tiestos cerámicos, 1,844 elementos muebles como metates y figurillas, 765 vasijas, 597 osamentas humanas, y se han identificado 1,348 rasgos naturales como cuevas, cenotes y cavernas semi inundadas que están relacionados con la presencia humana en la antigüedad
Prieto Hernández también mencionó los trabajos en curso en la Zona Arqueológica de Muyil, en Quintana Roo, como parte del programa Promeza. Estos trabajos incluyen investigaciones y labores de conservación en estructuras arqueológicas, así como la mejora de los servicios para los visitantes. Se está renovando la señalización del sitio, ampliando el estacionamiento y construyendo una nueva unidad de ingreso y recepción de turistas. Además, se habilitará una sala introductoria para brindar una experiencia más completa de este asentamiento prehispánico, ubicado a 20 kilómetros de la antigua ciudad de Tulum, en la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an.
Finalmente, se destacó que Muyil, también conocido como Chunyaxché, debe su nombre a una de las lagunas cercanas al sitio. Durante su ocupación, que abarca desde el periodo Preclásico Tardío (300-50 a.C.) hasta el Posclásico Tardío (1200-1450 d.C.), esta antigua ciudad maya basó su economía en la pesca y la explotación de los terrenos selváticos circundantes.
Con la conclusión del salvamento arqueológico en el Tramo 6 del Tren Maya, se marca un hito importante en la preservación del patrimonio cultural de la región y se abre paso para el avance continuo de esta importante obra de infraestructura. El Tren Maya no solo conectará ciudades y fomentará el desarrollo turístico, sino que también permitirá profundizar nuestro conocimiento sobre las antiguas civilizaciones que habitaron estas tierras, enriqueciendo así nuestra comprensión de la historia y la cultura de México.

Foto: Cortesía. – El proyecto del Tren Maya ha brindado una oportunidad única para realizar una investigación arqueológica de gran envergadura.