Karla Gómez NOTICIAS

El Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO), en colaboración con el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), será la sede del encuentro «Cartografías callejeras. Historias del graffiti en Oaxaca», que arrancará el jueves 23 de enero a las 16:30 horas con la presentación del libro El punto es marcar. Este evento busca abrir un diálogo intergeneracional entre graffiteros y graffiteras locales, así como entre los habitantes de la ciudad que han sido testigos y partícipes de la evolución de esta práctica urbana.

El libro y el encuentro son el resultado de un taller colaborativo que se llevó a cabo en el IAGO durante los meses de junio y julio de 2024. Este taller convocó no solo a artistas del graffiti, sino también a estudiantes, trabajadores, docentes y especialistas, con el fin de reivindicar la memoria colectiva de las prácticas urbanas contemporáneas. Según Itandehui Franco Ortiz, coordinadora del proyecto, el objetivo fue crear un registro que diera cuenta de la historia de estas prácticas efímeras en Oaxaca, así como del espacio y tiempo que comparten los artistas urbanos.

En un contexto donde las investigaciones suelen abarcar largos periodos históricos, este ejercicio busca retratar la brecha entre el graffiti y su rápida desaparición, pues los muros se pintan, los carteles se retiran y la ciudad cambia. En ese sentido, Franco Ortiz destacó la importancia de documentar un momento específico de esta expresión artística, a través de tres prácticas principales dentro del graffiti: tags, bombas y stickers.

“El graffiti es una práctica compleja que involucra consideraciones cromáticas, elección de materiales y, por supuesto, un profundo conocimiento del espacio urbano”, explicó la historiadora. Agregó que el título El punto es marcar subraya el concepto de dejar una huella indeleble en el espacio público.

A lo largo de la investigación, se identificaron y registraron las rutas más transitadas de la ciudad: no los puntos turísticos, sino las zonas de mayor afluencia, como puertas, ventanas, postes y mobiliario urbano. El mapeo abarca el centro de la ciudad, aunque no está completo, pues muchos artistas y estilos no están representados debido a la naturaleza efímera del graffiti. Sin embargo, la publicación destaca una gran diversidad de enfoques, técnicas y visiones del arte urbano en Oaxaca.

La publicación no solo incluye los testimonios de los creadores, sino también reflexiones sobre el graffiti y sus significados. Además, se pondrán en circulación materiales complementarios como el primer fanzine dedicado al graffiti de Oaxaca, publicado en 2001, que constó de cuatro volúmenes. Este material permitirá a los participantes y al público ver la evolución de la práctica en la ciudad. También se exhibirán fotografías, material bibliográfico y se ofrecerán actividades como un foro abierto, un conversatorio intergeneracional y una mesa dedicada a las chicas graffiteras. El intercambio de stickers, que son una tradición en la ciudad, también formará parte de las actividades.

Foto: Karla Gómez

Pie de foto: El encuentro es resultado de un taller colaborativo que durante el año pasado convocó a exponentes del graffiti y a habitantes de la ciudad para reivindicar la memoria colectiva alrededor de las prácticas urbanas contemporáneas.