Mencionó que la idea de proyectarse en el oficio inició a materializarse casi sin darse cuenta en el 2002
Isabel Nigenda NOTICIAS
El 22 de octubre, se celebra el Día del Gestor y la Gestora Cultural. Por ello, la gestora Guadalupe Cardoso nos comparte su experiencia
En entrevista, Guadalupe Cardoso, mencionó que la idea de proyectarse como gestora cultural inició a materializarse casi sin darse cuenta en el 2002, año en el que se incorporó en el Consejo Estatal para las Culturas y las Artes (Coneculta), en aquel entonces la dirección estaba a cargo del maestro Óscar Oliva.
Cardoso, consideró que aquella experiencia le permitiría desarrollarse profesionalmente como administradora pública, pues en aquel entonces contaba con estudios en dicha carrera. Sin embargo, adentrarse en las dinámicas del sector cultural le acarrearon una serie de enseñanzas al momento de buscar entender y conocer acerca de los procesos que se generaban particularmente en el Departamento de Museos Estatales, el cual estaba a cargo del maestro Ramiro Jiménez Chacón.
Parcialmente, compartió que participaba en algunas actividades de la Dirección de Patrimonio Cultural. Exactamente, en el 2007 comenzaron a surgirle las ofertas académicas en Gestión Cultural, por lo que, con la experiencia acumulada decidió ingresar al sistema de la Universidad Virtual de la Universidad de Guadalajara.
Es así, como poco a poco Guadalupe Cardoso, fue reconociendo que ejercer y adentrarse en la gestión cultural le permitía a nivel personal reinventarse, “afrontar miedos, trazar metas, descubrir habilidades, ser persistente, delinear mis valores. También me ha permitido tener la fortuna de conocer a personas excepcionales, conocer otras ciudades y contextos en los que se desarrolla la práctica de la gestión cultural”, detalló la maestra quien compara el ser gestora cultural con un rizoma, el cual representa la heterogeneidad, la ruptura de lo concéntrico y la disonancia.
Es decir, el ser gestora cultural para Guadalupe Cardoso representa el deber de asumir “la diversidad y pluralidad de voces, apuntar a varias direcciones en búsqueda de sentidos, colaborar bajo esquemas horizontales y armonizar necesidades con acciones”.
Por ello, en su perspectiva, la gestión cultural se configura desde el accionar, el cual está a favor del beneficio de las personas. Es así, como Guadalupe Cardoso procede con cautela a la hora de asegurarse en cada uno de sus proyectos de “propiciar espacios de escucha en donde todas y todos podamos ser y estar de manera libre e igualitaria”.
Con el tiempo y las enseñanzas en ella, se ha gestado la necesidad de “tejer encuentros para (re)aprender y (re)construir desde prácticas culturales que nos confronten con el deterioro en el que vivimos, que nos articulen de otras formas para adquirir la capacidad de transformar (nos) y mejorar la vida cotidiana”.
De igual manera, Guadalupe Cardoso, mencionó que las principales necesidades que tiene la cultura con la gestión cultural son “principalmente, establecer el diálogo y articular propuestas de acción que atiendan necesidades específicas de los territorios. Es necesario que este diálogo genere estructuras, particularmente ciudadanas, que identifiquen prácticas simbólicas con las que se pueda trabajar y reorientar la vida cultural de las comunidades”.
En el hacer, reflexionar y conocer las distintas perspectivas que puede adoptar la gestión cultural surgió en el 2017 Transversa.
Dijo que Transversa “surge de la necesidad de crear un espacio en donde pudiera accionar desde una perspectiva más integral, que no se limitara a la gestión artística. De ahí el nombre de TRANSVERSA, pues la propuesta radica en reconocer que la cultura ‘atraviesa’ todas las dimensiones y prácticas sociales, y por tanto, es un dispositivo a través del cual las personas pueden pensar sobre sí mismas, interpelar y transformar aquellos hábitos hegemónicos discriminatorios y excluyentes”.
Con el tiempo, resaltó, que han definido cuatro líneas de trabajo, las cuales son: Derechos humanos y culturales, Accesibilidad cultural e inclusión social, Impulso a la economía social y Desarrollo de las artes.
De dichas líneas de trabajo se han configurado los proyectos: Taller de lectoescritura en braille; Taller Detonando sentidos, elementos de la discapacidad visual y procesos de creación en condiciones de baja visión; Taller Transitando territorios. Arte, cultura y niñez migrante; Laboratorio Interdisciplinario para la enseñanza aprendizaje del Patrimonio Cultural; Cartografías de la memoria. Taller de creación literaria para personas adultas mayores; entre otros.
Actualmente, se encuentran configurando el Taller de Gestión Cultural Comunitaria y otras actividades que próximamente estarán dando a conocer en redes sociales.