La cantante chiapaneca, que con su música ha logrado capturar la esencia del folclore de su tierra, ha lanzado hasta la fecha cuatro discos
Karla Gómez NOTICIAS

Con una voz que expresa la esencia del México profundo, Tania Herrera se ha consolidado como una de las voces emergentes del regional mexicano. La cantante chiapaneca, que con su música ha logrado capturar la esencia del folclore de su tierra, ha lanzado hasta la fecha cuatro discos, en los que destacan canciones de compositores como Humberto Quintanar, Isac Martínez y Luis Méndez.
La pasión por la música de Tania nace en su familia, donde desde pequeña se sentaba en las celebraciones a cantar. “Me ponía a cantar siempre, incluso en las fiestas de cumpleaños. La música ha sido parte de mí desde siempre”, comenta con emoción. Sin embargo, fue hace un año y medio cuando decidió inclinarse por el género regional mexicano, un estilo que considera un “orgullo mexicano” y que la conecta profundamente con su cultura y raíces.
La cantante no solo interpreta canciones con sentimiento, sino que también cree que la clave está en transmitir la emoción de cada letra: “Es el sentimiento que le tienes que imprimir a la canción. Cantar con emoción, porque la música mexicana es un canto al alma”. Esta convicción es la que la impulsa a seguir adelante, buscando siempre compartir con su público lo mejor de su tierra y su talento.
Uno de los pilares de su carrera es su participación en la Asociación de Autores y Compositores Chiapanecos, donde se honra de ser parte de un colectivo que impulsa y da visibilidad a los talentos locales. “Es muy importante dar a conocer a los talentos chiapanecos”, asegura Tania, quien se siente orgullosa de interpretar temas creados por los miembros de esta asociación.
La carrera de Tania Herrera sigue ganando fuerza con cada paso que da, llevando en alto la bandera de la música mexicana y demostrando, una vez más, que la pasión por el canto no tiene fronteras.
Foto: Karla Gómez
Pie de foto: La carrera de Tania Herrera sigue ganando fuerza con cada paso que da, llevando en alto la bandera de la música mexicana y demostrando, una vez más, que la pasión por el canto no tiene fronteras.