KARLA GÓMEZ NOTICIAS

La migración, la memoria y las luchas sociales en América Latina se convierten en ejes centrales de la exposición Bi x ara ndumui, aya p’ampay. Enterrar un cadáver/Suspender la aflicción, de la artista mexicana Adela Goldbard, inaugurada en el Ex Teresa Arte Actual, recinto del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL). La muestra, abierta hasta el 14 de septiembre, invita a reflexionar sobre las formas en que los pueblos latinoamericanos han resistido la opresión y, al mismo tiempo, han buscado reimaginar el futuro desde la colectividad y la creación artística.

El título de la exposición recupera expresiones del hñähñu (otomí) y del quechua que, en su contexto original, aluden a rituales funerarios; sin embargo, Goldbard los resignifica como símbolos de transformación y renacimiento, una manera de pensar los procesos históricos no como hechos aislados, sino como ciclos que se repiten y se reconfiguran. De ahí que la artista hable de una “temporalidad en espiral”, donde el colonialismo, la opresión y la represión reaparecen en distintos momentos, recordándonos que las luchas sociales siguen vigentes.

La elección de Ex Teresa Arte Actual no es fortuita. Para Goldbard, su arquitectura cargada de historia se convierte en un espacio idóneo para dialogar con cada pieza expuesta, reforzando la idea de que las obras no son estáticas, sino que encuentran eco en el lugar y en las personas que las recorren.

Un aspecto fundamental de la exposición es su carácter colaborativo. En ella confluyen múltiples voces y saberes: desde comunidades hñähñu de El Alberto (Hidalgo) y mujeres textileras de San Agustín Etla (Oaxaca), hasta colectivos de pirotécnicos de Tultepec y habitantes de las comunidades andinas de Chumbivilcas, Perú. Esta red de colaboraciones subraya la dimensión colectiva del arte y su capacidad para unir experiencias diversas en torno a una memoria compartida de resistencia y creatividad.

La muestra incluye piezas de gran fuerza simbólica, como la videoinstalación Rinxui (En la noche), basada en un cortometraje que documenta un performance en el que una comunidad indígena recrea el cruce fronterizo hacia Estados Unidos. Este ejercicio, al mismo tiempo pedagógico y performativo, busca advertir a los jóvenes sobre los peligros de la migración ilegal, pero también ha derivado en una práctica de “tanato-turismo”, donde visitantes externos reviven, en carne propia, la violencia y el riesgo de esos trayectos.

Otro de los momentos destacados de la exposición son las tres pinturas pirotécnicas de gran formato, resultado de la experimentación conjunta entre Goldbard y maestros pirotécnicos de Tultepec. La artista explica que, aunque la pirotecnia es un arte efímero, su registro fotográfico lo convierte en una huella permanente, un modo de desafiar la fugacidad de la materia y la memoria.

Con esta propuesta, Adela Goldbard no solo documenta, sino que invita al espectador a participar en un diálogo sobre las heridas abiertas de nuestra historia y las formas en que las comunidades siguen transformando el dolor en acción, ritual y esperanza. Su exposición se convierte así en un espacio de encuentro entre el arte, la política y la vida comunitaria, un recordatorio de que la memoria se construye colectivamente y que el arte puede ser, también, un acto de resistencia.

El público podrá visitar Bi x ara ndumui, aya p’ampay hasta el 14 de septiembre en Ex Teresa Arte Actual, ubicado en Licenciado Verdad No. 8, Centro Histórico, en un horario de martes a domingo de 10 a 18 horas, con entrada libre. Además, la artista ofrecerá una visita guiada el viernes 22 de agosto a las 16:00 horas, donde compartirá con los asistentes su visión y los procesos detrás de cada obra.

Foto: KARLA GÓMEZ

Pie de foto: La muestra incluye piezas de gran fuerza simbólica, como la videoinstalación Rinxui (En la noche).