Tina Modotti demostró que la fotografía puede ser un vehículo poderoso para expresar convicciones

Isabel Nigenda Noticias

En el aniversario número 127 del nacimiento de Tina Modotti, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) rinden homenaje a la destacada fotógrafa y activista social italiana que dejó una profunda huella en la historia de la fotografía mexicana.
Tina Modotti, nacida en Údine, Italia, en 1896, dejó una marca indeleble en la escena artística y cultural mexicana a través de su lente visionaria y su compromiso con la justicia social. Su trabajo se mantiene vivo y relevante, siendo un testimonio conmovedor de la época en la que vivió y de las personas y lugares que capturó con su cámara.
La Colección Manuel Toussaint del Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) resguarda una serie de imágenes capturadas por Tina Modotti entre 1927 y 1930. Durante este período, Modotti inmortalizó los murales de Diego Rivera en el edificio de la Secretaría de Educación Pública y en la Escuela de Agronomía de Chapingo, dejando un legado visual de incalculable valor artístico e histórico.
El Museo Nacional de Arte (Munal) también resguarda varias imágenes de Modotti, muchas de las cuales provienen del Comitato Tina Modotti en Trieste, Italia. Estas impresiones, extraídas de los negativos originales, incluyen piezas como «Mujer con canasto en la cabeza y en la mano», «Corrida de toros en Huichitlán, Oaxaca», «Mujer embarazada cargando niños», «Dos lirios» y «Palmeras», entre otras.
La figura de Tina Modotti trasciende su labor como fotógrafa; su vida estuvo enmarcada por una profunda pasión por la justicia social y un compromiso activo con las causas que defendió. En palabras del fotógrafo Edward Weston, Modotti era una mujer que había conocido la muerte y la desilusión, y que había vivido con valentía y sin miedo. Su trayectoria artística estuvo influenciada por su participación en el Partido Comunista Mexicano, donde se relacionó con figuras destacadas del arte y la cultura de la época.
La obra de Tina Modotti no solo registra la belleza visual de su entorno, sino que también refleja su aguda conciencia social y su conexión con los temas políticos y culturales de su tiempo. Sus imágenes capturan la esencia de un México en transformación y sus habitantes, desde los campesinos y obreros hasta los muralistas y líderes estudiantiles.
La fotógrafa italiana también dejó una impronta en la historia literaria mexicana. En el libro «El artista en Nueva York» de José Clemente Orozco, se menciona su contribución como modelo para los desnudos pintados en la Capilla de Chapingo. La presencia de Tina Modotti en la escena artística y política de México es recordada como una de profunda relevancia y compromiso.
A lo largo de su vida llena de desafíos y aventuras, Tina Modotti demostró que la fotografía puede ser un vehículo poderoso para expresar convicciones y luchar por la justicia. Su legado sigue vivo en las imágenes que capturó y en su influencia duradera en la historia de la fotografía y la cultura mexicana. En este aniversario de su nacimiento, recordamos y honramos a Tina Modotti como una figura excepcional que trascendió las fronteras artísticas y sociales de su época.

Foto: Cortesía.
Pie de foto: Tina Modotti, nacida en Údine, Italia, en 1896, dejó una marca indeleble en la escena artística y cultural mexicana.