La música, el folklor, la gastronomía y el arte tradicional protagonizan una narrativa vistosa y sonora

Karla Gómez NOTICIAS

Colorida, espectacular y vibrante es la celebración de la Guelaguetza que en una tercera edición es recibida en el Centro Cultural Tijuana (Cecut), institución de la Secretaría de Cultura federal, hasta el domingo 16 de junio.

Esta festividad oaxaqueña, es un acontecimiento en que la música, el folklor, la gastronomía y el arte tradicional protagonizan una narrativa vistosa y sonora para que el público de esta región de frontera pueda disfrutar de manera gratuita un acercamiento a Oaxaca y sus ocho regiones, y aquellas tradiciones que caracterizan a un estado de arraigada mística cultural y artística.

La Guelaguetza comenzó con la habitual calenda, un festivo desfile que se celebró entre dos sitios emblemáticos de la Ciudad de Tijuana, la Glorieta a Cuauhtémoc, y la explanada de Cecut, a donde fue invitada toda la toda la gente a disfrutar y conocer las tradiciones del sureño estado.

Al dar la bienvenida al público presente, la directora general de Cecut, Dra. Vianka Robles Santana, expresó “la Guelaguetza ocupa un lugar muy importante en el imaginario de la cultura de México para el mundo, porque es no sólo la reunión de los pueblos sino también es muy representativa por la alegría, los trajes, la música, nos representa en otras partes del globo”.

“En Cecut tenemos el objetivo y la obligación de circular la riqueza cultural y artística de México para el disfrute de todas las audiencias, por ello estamos muy felices de llegar a la tercera edición de la Guelaguetza en el Centro Cultural Tijuana”.

Por su parte Maribel Aida Velasco García, de Dirección de Atención a Pueblos Indígenas del Ayuntamiento de Tijuana dijo, “queremos mostrar un poquito de lo que se tiene en Oaxaca con sus ocho regiones, sabemos que hay una gran comunidad oaxaqueña asentada en Tijuana, en esta ciudad que nos abre los brazos para poder seguir siendo hermanos y hermanas”.

“Disfrutemos de esta gastronomía, el chocolate, el pan y los mezcales porque siempre decimos que ‘salimos de nuestro pueblo, pero nuestro pueblo nunca sale de nosotros’ y hoy venimos a presentar todo este trabajo de Oaxaca”.

A cargo de la organización de esta edición de la Guelaguetza estuvo Daniel Ochoa Carrasco, quien habló también, “los oaxaqueños siempre somos solidarios porque desde pequeños nos enseñan a dar, a trabajar para el otro, gracias a las instituciones hemos podido traer la Guelaguetza desde Oaxaca, desde Tlaxiaco”.

“Invitamos a toda la gente porque apenas empieza nuestra fiesta, todavía falta mucho, participen comprándolo a todos nuestros artesanos que vienen de Oaxaca, traemos mezcal de las ocho regiones, tlayudas, pan, chocolate y mole”, afirmó.

La celebración continuó acompañada de las tradicionales marmotas, chinas oaxaqueñas y danzantes de cada una de las regiones de aquella entidad, quienes desde el escenario entusiasmaron al público portando sus coloridas vestimentas brindando música y danzas, como el Fandango Mixe y el Jarabe Yalateco de la región de la Sierra; la Flor de Piña y Flor de Naranjo de la Cañada; el Jarabe Trique y la Canción mixteca.

Diversas bandas de música amenizaron esta fiesta oaxaqueña que migró y se hizo presente hasta estas tierras del norte, ejecutaron jarabes y chilenas de la Costa; los sones de la Región del Papaloapan; las Tehuanas, la Sandunga del Istmo; y las chinas Oaxaqueñas de los Valles Centrales.

Foto:  Karla Gómez

Pie de foto:  La Guelaguetza comenzó con la habitual calenda, un festivo desfile que se celebró entre dos sitios emblemáticos de la Ciudad de Tijuana, la Glorieta a Cuauhtémoc.