Un puente de movimiento y emoción

Karla Gómez NOTICIAS

El Teatro Francisco I. Madero fue escenario de una muestra de danza contemporánea titulada «Un Diálogo de Danza Contemporánea en el Sur». Este evento, realizado a través del taller M&M, reunió a talentosos coreógrafos y bailarines en una celebración del movimiento y la expresión artística.

Alexander Herrera, coreógrafo y bailarín, compartió en entrevista la visión detrás de este evento. «El evento es una primera intervención de lo que está sucediendo en el taller M&M, una propuesta anual de talleres donde se traen invitados», comentó. La iniciativa comenzó como una semana de talleres impartidos por Herrera y ha ido evolucionando gracias a la creación de redes de colaboración.

Este año, el evento contó con la participación especial de Dave Wilson, un bailarín retirado que actualmente desarrolla proyectos en Canadá, y el colombiano Falciony Patiño. Estos invitados se unieron a los talleres M&M, enriqueciendo la experiencia con sus conocimientos y técnicas.

Herrera, quien actualmente reside en Toronto, Canadá, destacó la importancia de crear conexiones internacionales en el mundo de la danza. «El objetivo es generar una red no solamente desde mi persona. Quiero demostrar que el puente que une a un país con otro es muy corto. La posibilidad de que un chiapaneco pueda ir a estos territorios y que personas de otros países puedan llegar a México, especialmente a Chiapas, para compartir lo que hacen, sus metodologías, sus técnicas, y apreciar lo que está pasando aquí», explicó.

El coreógrafo también reflexionó sobre el estado actual de la danza contemporánea en Chiapas. «La danza contemporánea en Chiapas está pasando por un proceso de desarrollo que está ayudando a ver una nueva manera de coreografiar, donde las ideas parten de temas sociales o personales. Chiapas está en proceso de creación en donde su punto central es su entorno», afirmó.

Para Herrera, la danza y la cotidianidad están profundamente entrelazadas. «Cuando una persona crea o baila desde sus sentimientos y vivencias, la danza se vuelve más humilde, más viva, más llena de amor y sentimiento, lo que te enchina la piel», expresó con emoción.

El evento «Un Diálogo de Danza Contemporánea en el Sur» no solo mostró el talento de los participantes, sino también la vida y la danza como una sola entidad. «La vida y la danza son una sola. El movimiento está en la cotidianidad», concluyó Herrera.

Este evento marcó un importante paso en la promoción y desarrollo de la danza contemporánea en Chiapas, mostrando cómo el arte puede servir como un puente entre culturas y un reflejo de la vida misma.

Foto: Karl Gómez

Pie de foto: Un proceso de desarrollo y creatividad en Chiapas.