Puertas de comprensión de la historia y la riqueza cultural
Karla Gómez Noticias
La riqueza cultural y los lazos históricos entre antiguas civilizaciones mayas están emergiendo en la Zona Arqueológica de Edzná, ubicada en Campeche, gracias a los avances del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza). Este programa, liderado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), ha desenterrado evidencias que conectan a Edzná con la distinguida ciudad maya de Chichén Itzá, en el estado de Yucatán, revelando interacciones que se remontan a más de mil años atrás.
El director general del INAH, Diego Prieto Hernández, anunció en la conferencia matutina del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, los notables progresos en la exploración y consolidación de una estructura clave en el conjunto principal de la Zona Arqueológica de Edzná. En ese evento, se informó sobre los avances del Tramo 2 del Tren Maya, y se destacó la colaboración del INAH con la Guardia Nacional y la Secretaría del Bienestar para habilitar un centro de acopio y distribución de víveres en el Museo Histórico de Acapulco, Fuerte de San Diego, en apoyo a la población afectada por el huracán Otis.
Prieto Hernández mencionó que el Promeza ha sido fundamental para el conocimiento de antiguos asentamientos y sus interacciones, señalando la importancia de la «Casa de los Itzáes» en Edzná, que hace referencia al linaje de origen chontal que se estableció en la región.
Los trabajos liderados por el arqueólogo Antonio Benavides Castillo se han centrado en la exploración de la Estructura 512, revelando una arquitectura que data de diferentes períodos: desde la ocupación tardía del sitio en el Posclásico Temprano (900-1200 d.C.) hasta un basamento más antiguo, erigido en el Clásico Temprano (200-600 d.C.).
La Estructura 512, una edificación de planta cuadrangular con una entrada porticada y dos crujías, ha revelado que para su construcción se reutilizaron materiales de estructuras más antiguas, como un muro de piedras tomadas de construcciones precedentes. Excavaciones también revelaron dos columnas en la habitación posterior, una cavidad excavada en la roca basal y restos óseos que, en épocas prehispánicas, fueron retirados posiblemente para ser depositados en otro sitio.
El director del INAH destacó la similitud de la Estructura 512 con las edificaciones tipo patio-galería de Chichén Itzá, utilizadas para ceremonias religiosas y ofrendas, subrayando los vínculos entre Edzná y Chichén Itzá en el Posclásico Temprano.
Además de la Estructura 512, el Promeza ha intervenido otros puntos significativos en Edzná, como los Mascarones de la Estructura 414, el Edificio de los Cinco Pisos, la Escalinata jeroglífica y el Nohochná, logrando un avance del 80% en investigación y conservación arqueológica. El programa también ha iniciado la construcción del museo de sitio y el Centro de Atención a Visitantes (Catvi) en esta zona arqueológica, ubicada a 55 kilómetros de la capital campechana y en cercanía al Tramo 2 del Tren Maya.
Foto: Cortesía.
Pie de foto: El proyecto Promeza revela la grandeza de antiguas civilizaciones.