“Antifaces”, el poemario de la actriz, maestra y poeta tuxtleca Ana Lilia Nucamendi, aborda temas que parten del amor, la negación, la confrontación, la aceptación y el gozo

Isabel Nigenda NOTICIAS

Foto: Cortesía.
Pie de foto: Ana Lilia Nucamendi.

Para la actriz, maestra y poeta tuxtleca Ana Lilia Nucamendi, la poesía es “un acto de absoluta honestidad”, en donde acorta distancias, protesta, coloca límites, recurre a la creación de fantasías, de diálogos filosóficos. Se descubre en los múltiples antifaces que posee y aquellos que adquiere en el escenario, en el teatro.

Precisamente, obedeciendo a la energía creadora de las artes, escribió el poemario “Antifaces”.

“Antifaces, surgió de una selección de textos poéticos que tenía escritos hace algún tiempo. Comencé a trabajar más de cerca en una pausa que hice dentro de mis actividades artísticas, la actuación”, mencionó.

De igual manera, señaló que como actriz ha memorizado y expresado las ideas y emociones de otros autores. Por ello, como escritora le ha sido importante crear sus propios mundos, expresarse, sentir y pensar la vida.

“Fundamentalmente, reconocer las diversas energías que transitan dentro del ser creador”, añadió.

Durante la entrevista, la escritora refirió que su proceso de escritura como poeta inició desde su preferencia por leer poesía y descubrir el poder que tienen las palabras, las que, generalmente, permiten conducir a otro estado emocional y mental.

“Comencé escribiendo cartas que nunca envié y describiendo paisajes que me impresionaban y de pronto me vi corrigiendo mis escritos, hasta que fue inevitable buscar talleres para la escritura y formación poética”, argumentó.

Por medio de la poesía, Ana Lilia Nucamendi cuenta la vida desde otros ángulos.
“La vida me impresiona constantemente. La gente, su sonrisa o seriedad, sus dolores, sus amores, que son también los míos. A veces, para traducir, si se permite la expresión lo que siento con lo que veo en la naturaleza y en la vida”, dijo.

Finalmente, la poeta refirió que las temáticas que aborda la obra parten del amor, la negación, la confrontación, la aceptación y el gozo. Igualmente, los lectores pueden encontrar las impresiones que tiene la autora en torno a la naturaleza, por ello, podrán leer un poema titulado ‘La cuija'».

Entre otros temas, están el paso del tiempo, los lugares transitados, la situación migratoria y la muerte, aquella que le recuerda a la autora que se debe vivir lo mejor que se pueda.