El poblado quedó desolado tras la huida de sus habitantes por la violencia generada entre dos grupos armados que se disputan el territorio

Jhonatan González NOTICIAS

En silencio y acompañados de un crucifijo con el Cristo Negro, fue como este miércoles los más de 4 mil desplazados de Tila, Chiapas, peregrinaron por las calles de Yajalón, localizado en la zona norte del estado, para exigir a las autoridades justicia, reparación de daños, retorno seguro y restitución de propiedades.
Marcelino Torres Pérez, representante de los desplazados, expuso que de manera paralela una comisión integrada por representantes de los 17 barrios, sostuvieron en la capital chiapaneca la segunda reunión con las autoridades de los tres niveles de gobierno, a fin de que sus preocupaciones sean escuchadas.
“Por eso demostramos que exigimos un retorno seguro, un retorno, donde lleguemos cada uno a nuestras casas, retornemos, pero que el gobierno nos garantice una seguridad, donde los militares realmente estén en la base permanente, donde nos cuiden diario a diario”, detalló.
Fue hace dos semanas que el poblado de Tila quedó desolado tras la huida de sus habitantes por la violencia generada entre dos grupos armados que se disputan el territorio, mientras que los desplazados se refugiaron en albergues que se instalaron en la cabecera municipal de Yajalón y los poblados de Petalcingo y El Limar.
Asimismo agregó que hasta ahora ninguna de las familias han podido retornar por el temor a ser agredidos, por lo que algunos han ingresado únicamente para vigilar su patrimonio y sus animales de traspatio que quedaron en el abandono, sin embargo, están a la espera del pago de daños para quienes lo perdieron todo.
“Que se dé la indemnización para todos nuestros habitantes que fueron quemadas sus casas, sus transportes, sus comercios, fueron golpeados o destrozadas algunas casas, hubieron violaciones, masacres, intimidaciones, tenemos problemas psicológicos, hay problemas físicos”, enfatizó.
Los pobladores en su mayoría con ropa blanca y pancartas caminaron más de 5 kilómetros, partieron desde el albergue que se ubica en el auditorio deportivo hasta el centro de la demarcación, donde al finalizar realizaron un pronunciamiento, entonaron la oda a la alegría y el Himno a Chiapas, así como el pase de lista de cada uno de los barrios, en tanto las infancias participaron con algunos dibujos.
A pesar de que han transcurrido dos semanas de la “noche trágica”, los pobladores aún recuerdan el impase que los obligó a dejar su patrimonio y su historia, sin saber hasta ahora cuando volverán a sus hogares, puntualizó Ruth, una de las habitantes de Tila.
“Yo tengo un nudo en la garganta que todo lo que vivimos como cuatro o cinco noches estuvo muy feo, fue como una película de terror para nosotros, mis hijos ya se dormían con los zapatos puestos para salir corriendo, no sé pero estuvo muy feo para nosotros”, aseveró.
De acuerdo con los habitantes la violencia en Tila inició después del levantamiento armado de 1994 con el surgimiento del grupo de choque que se denominó Paz y Justicia, pero que revivió casi 30 años después, el cual hasta ahora ha provocado que Tila y sus habitantes permanecieran sitiadas por casi 15 días.
Además de que el pasado 4 de junio el enfrentamiento entre grupos armados hizo que decenas de familias huyeran.

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Más de 4 mil desplazados de Tila, peregrinaron para exigir a las autoridades justicia, reparación de daños, retorno seguro y restitución de propiedades.
Foto: Jhonatan González