Especialista menciona que se debe extremar precauciones ante las altas temperaturas, pues derivado de un golpe de calor puede ocasionar daños neurológicos

Daniela Grajales NOTICIAS

PIE DE FOTO. Javier Arturo Sanchez Avendaño exhorta a la población a extremar precauciones en esta temporada y prevenir el golpe de calor. Foto: Daniela Grajales

Ante la llegada de altas temperaturas en la entidad, el doctor Javier Arturo Sanchez Avendaño, coordinador estatal de servicios médicos de Cruz Roja Mexicana Delegación Chiapas, exhorta a la población a extremar precauciones en esta temporada y prevenir el golpe de calor.
Sanchez Avendaño, mencionó que el golpe de calor es la incapacidad del cuerpo para mantener la regulación de la temperatura, elevándose por arriba de los 39 grados, la cual puede ocasionar daños neurológicos si no se atiende de manera rápida.
“El golpe de calor es una situación que puede predominar cuando tenemos temperaturas o alzas térmicas superiores a los 39 o 40 grados centígrados, y que esa es una de las repercusiones en la salud muy importante, ya que hay que tomar en cuenta los efectos que tiene en el paciente, por el golpe de calor pueden tener un desmayo y a veces puede tener repercusiones de tipo neurológicas muy importantes».
El especialista detalló que los síntomas de este padecimiento comienza con dolor de cabeza, además de la temperatura elevada, son piel enrojecida, caliente y seca (sin sudor), pulso rápido, dolor de cabeza súbito, mareos y vómitos, aceleramiento de los latidos del corazón, trastornos de conciencia y convulsiones.
“En este caso en el individuo tomando en cuenta que inicia con dolor de cabeza, puede existir la parte de desequilibrio electrolítico”.
Sin embargo, una de las acciones para mantener el cuerpo hidratado es tomar electrolitos, ya que estos ayudan no solo a nivelar el líquido en el cuerpo, sino también a recuperar sustancias que por la sudoración se van perdiendo.
“La única pauta que nos va a servir para recuperar son los electrolitos, y que en este caso si hay una pérdida significativa de sodio, de cloruro de potasio es la única forma”.
No obstante, agregó que depende de cada persona el responder a la hidratación vía oral, pues en otros casos la persona tiene que ser canalizada.
“Pero a veces el paciente no tolera la vía oral y en este caso el paciente si necesita ir al área de urgencias y canalizarlo, en este caso tener un acceso venoso que nos permita poder hidratar, fíjate que es un cambio maravilloso en un lapso de unos minutos el paciente se puede llegar a recuperar”.
Arturo Avendaño, enfatizó que mucho influye la temperatura a la cual estuvo expuesta la persona, e hizo un recordatorio para no exponerse en horarios donde los rayos del sol están más intensos.
“También debe influir a que temperatura estuvo expuesto e incluso en algunas ocasiones se les recomienda a los pacientes tomar un antipirético (paracetamol), estar en vigilancia en casa, no exponerse al sol de 11 de la mañana a 4 de la tarde y siempre estar hidratado para evitar alteraciones neurológicas”.

Qué hacer ante una insolación

• Llevar a la persona afectada a un lugar con sombra y lo más fresco posible.
• Colocarla en posición semisentada, con la cabeza levantada para favorecer la respiración y que pueda entrar aire.
• Para reducir la temperatura corporal, hay que quitarle algo de ropa, darle aire (abanico o ventilador) y utilizar compresas de agua fría en la frente, la nuca, el cuello y otras partes del cuerpo.
• También debe tomar agua fresca (le ayudará a bajar la temperatura corporal) para rehidratarse, pero debe hacerlo a pequeños sorbos y no de golpe, pues esto empeoraría su estado.
• Una vez que haya mejorado su estado hay que acompañarla a un servicio médico de urgencias para someterla a una revisión exhaustiva y posteriormente a un estrecho seguimiento médico durante algunos días.