Ana Liz Leyte NOTICIAS

La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), dio a conocer que, en el cuarto mes de 2025 se registró una ligera mejora en indicadores de desempleo y subocupación, pero también la persistencia en la informalidad laboral, que afecta a más de la mitad de la población ocupada.
El Inegi expone que la población económicamente activa (PEA) sumó 61.5 millones de personas, apenas 45 mil más que en abril de 2024. A pesar del incremento, refiere que la tasa de participación económica cayó de 60.5 por ciento a 59.4 por ciento.
Por su parte, y con respecto a la tasa de desocupación la Encuesta indica que esta se ubicó en 2.5 por ciento, con una disminución de 0.1 puntos porcentuales respecto al mismo mes del año anterior.
Mientras que, en la subocupación, es decir, las personas que tienen empleo, pero desean trabajar más horas, añade que también está bajó, pasando de 7.7 por ciento a 7.1 por ciento del total de ocupados. Esto representa una reducción de 346 mil personas en situación de subempleo.
Sin embargo, las cifras del Instituto resaltan que uno de los indicadores más preocupantes sigue siendo la tasa de informalidad laboral, que aumentó ligeramente a 54.7 por ciento de la población ocupada (32.7 millones de personas). Es decir, más de la mitad de quienes trabajan lo hacen sin acceso a prestaciones ni seguridad social.
En particular, la ocupación en el sector informal —quienes laboran en unidades económicas no registradas— alcanzó 29 por ciento del total, lo que implica un crecimiento de 0.9 puntos porcentuales frente a abril de 2024.
En este indicador, el Inegi menciona que la informalidad golpeó con mayor fuerza a las mujeres, cuya participación económica bajó en abril de este año de 46.4 por ciento a 45.4 por ciento, mientras que en los hombres fue de 75.2 por ciento, también en descenso. Además, agrega que las mujeres registran una tasa de desocupación ligeramente mayor (2.7 por ciento frente al 2.4 por ciento de los hombres) y tienen menos acceso a trabajos formales y asalariados.
En términos de posición laboral, la ENOE menciona que los empleadores crecieron (de 5.3 por ciento a 6 por ciento del total), mientras que los trabajadores por cuenta propia cayeron (de 22.1 por ciento a 21.3 por ciento), lo que podría indicar un leve movimiento hacia formas más estructuradas de empleo… aunque muchas de ellas aún se desarrollan en la informalidad.
INFORMALIDAD POR ENCIMA DEL 70 %
Si bien en esta actualización no se desglosan directamente cifras por estado, los datos históricos y subnacionales de la ENOE permiten observar que Chiapas se mantiene entre las entidades con mayores niveles de informalidad laboral del país.
En 2025, las áreas menos urbanizadas —que en gran parte corresponden al perfil demográfico y económico de Chiapas— reportaron una tasa de informalidad laboral del 68.5 por ciento, superior incluso al promedio nacional. La ocupación en el sector informal en esas zonas llegó al 34.2 por ciento.
Estos niveles de informalidad se explican en buena medida, por la alta concentración de empleo en sectores primarios como la agricultura de subsistencia, el comercio ambulante y el trabajo por cuenta propia, todos ellos caracterizados por ausencia de derechos laborales, salarios bajos y escasa protección social.

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En el cuarto mes de 2025 se registró una ligera mejora en indicadores de desempleo y subocupación.
Foto: Ana Liz Leyte