Cada pintura es una historia llena de anhelos y añoranzas.

Isabel Nigenda Noticias

A los 90 años de edad, Carmen Archila expone su serie «Paisajes de Luz» en el garaje de su casa. Aunque la puerta está abierta, es su corazón el que se muestra totalmente accesible. Sentada en una silla rodeada de plantas y arropada por el amor de su familia, Carmen sonríe con satisfacción, consciente de que ha logrado mostrar al mundo sus piezas pintadas al óleo. En estas obras de arte se encuentran plasmados paisajes, flores, cielos, soles y lunas, pero también se vislumbra mucho de ella, de su vida y de los 90 años que revelan la pasión ardiente de su existencia.
Carmen invita a más personas a descubrir el placer de una actividad que puede hacer olvidar enfermedades y preocupaciones. Al mismo tiempo, expresa una profunda gratitud por el apoyo que le ha brindado su familia, quienes la han animado a perseguir sus sueños y seguir su pasión artística.
El punto de partida de esta increíble travesía se remonta al inicio de la pandemia de Covid-19. En aquel entonces, su nieta, la dramaturga Laura Jiménez Abud, le obsequió pinturas y pinceles para que Carmen iniciara el proceso creativo. Desde ese momento, Carmen pasaba sus días y noches entregada a la pintura. No solo su estado de ánimo mejoró notablemente, sino también su salud.
Durante los últimos tres meses, Luz Martínez ha sido la maestra de Carmen, acompañándola en este apasionante viaje artístico. Luz destaca que la exposición es el resultado del taller que ha impartido a Carmen y resalta que cada pintura es una historia llena de anhelos y añoranzas.
Por otro lado, se hace hincapié en la importancia de crear espacios recreativos para personas mayores, ya que es un sector de la población que aún puede desarrollarse creativamente y sentirse vital. La muestra pictórica de Carmen Archila es un testimonio vivo de esto.
La responsable de organizar este evento tan especial, que celebra el día de su Santo, su cumpleaños y la exposición de sus obras, es Laura Jiménez Abud, su nieta. Ella reconoce la tenacidad y la fuerza de Carmen para superar los desafíos que la vida le ha presentado, incluyendo una pandemia que la mantuvo aislada durante dos años, dos neumonías y 90 años llenos de trabajo y obligaciones antes de poder dedicarse a aquello que tanto ama.
En entrevista, Carmen dice: «Siempre quise hacer tres cosas: volar, andar en bicicleta y pintar». Han pasado 90 años para que finalmente pudiera tomar un pincel y sentirse libre en un lienzo. Curiosamente, ella piensa que experimentaría la misma sensación de libertad con alas o montando en bicicleta a gran velocidad.
En esta tarde de domingo, con el sonido de las campanas de la iglesia de San Jacinto resonando en el ambiente y con la música de la violinista Brigitte Zetina, Carmen Archila descubre lo que significa volar. Mientras diversas personas admiran sus pinturas, Carmen siente en lo más profundo de su ser la plenitud de haber hecho realidad sus sueños y su pasión artística.
Con su exposición «Paisajes de Luz», Carmen Archila ha demostrado que nunca es tarde para perseguir los sueños y encontrar la felicidad a través del arte. Su valentía y determinación son un recordatorio para todos de que la edad no es un obstáculo cuando se tiene el coraje de seguir el llamado del corazón.

Foto: Isabel Nigenda.
Pie de foto: Exposición «Paisajes de Luz», Carmen Archila.