Ángel Torres Culebro reconoció que se enfrenta un atraso de pagos de más de 900 millones de pesos con la Conagua y el deterioro de la infraestructura

Jhonatan González NOTICIAS

Mientras miles de familias sufren por la falta de agua potable, el alcalde de Tuxtla Gutiérrez, Ángel Torres Culebro, reconoció públicamente que el Ayuntamiento enfrenta un atraso de pagos de más de 900 millones de pesos con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), situación que agrava la ya precaria infraestructura hidráulica de la capital chiapaneca.
El edil admitió que existen dos fugas de gran magnitud que han afectado principalmente a las zonas norponiente y nororiente de la ciudad, donde se registra un servicio irregular y con tandeos prolongados.
Pese a ello, Torres Culebro aseguró que se está trabajando en la reparación de una tubería de 30 pulgadas, que supuestamente quedará lista “en los próximos días”.
Sin embargo, la crisis se agudiza. Este jueves, el Ayuntamiento informó la suspensión total del servicio de agua potable debido a fallas en el sistema de bombeo del Tanque de Rebombeo “Cerro Hueco”, dejando sin suministro a una amplia zona de la ciudad.
La población, cansada de promesas incumplidas, enfrenta una situación insostenible como largas jornadas sin agua, compras constantes de pipas y la ausencia de un plan efectivo para garantizar el acceso al líquido vital.
Las declaraciones del presidente municipal, lejos de ofrecer soluciones concretas, evidencian el abandono histórico y la mala gestión del sistema hidráulico tuxtleco. A pesar de los convenios anunciados con Conagua, la deuda acumulada y el deterioro de la infraestructura reflejan años de negligencia gubernamental que hoy pagan los ciudadanos con sed e indignación.

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Ángel Torres Culebro admitió que existen dos fugas de gran magnitud que han afectado principalmente a las zonas norponiente y nororiente de la ciudad.
Foto: Jhonatan González