Cuyo cuerpo fue encontrado el pasado sábado con claros signos de violencia

María Moreno CORRESPONSAL/NOTICIAS

Ocosingo.- La tarde de este lunes, cientos de estudiantes de la carrera de Enfermería de la Universidad Benito Juárez García salieron a las calles para exigir justicia por la muerte de la joven Yerli Yeritza, de 18 años, cuyo cuerpo fue encontrado el pasado sábado con claros signos de violencia.

Pese a ello, las primeras declaraciones oficiales apuntaron a un presunto suicidio, una versión que generó indignación entre la comunidad estudiantil, pues aseguran que existen evidencias clave que fueron ignoradas y que señalan un posible feminicidio.

Por ello las autoridades reclasificaron el caso como feminicidio.

Entre los elementos que cuestionan, destacan marcas de violencia que no corresponden a la hipótesis inicial y circunstancias del hallazgo que no han sido aclaradas por las autoridades.

Yerli, originaria del municipio de Tila, había llegado a Ocosingo junto con su familia tras huir de la violencia, luego de que hombres armados levantaran a su padre hace dos años. Desde entonces, su familia vivía desplazada, sin conocer el paradero del jefe del hogar.

Durante la marcha, las y los estudiantes levantaron pancartas con mensajes como “Ni una más”, “Justicia para Yerli” y “Por las voces que fueron silenciadas”, exigiendo que el caso se investigue con seriedad y en apego a la perspectiva de género, sin descartar líneas que apunten a un crimen de violencia de género.

La indignación también recae en la aparente prisa con la que las autoridades intentaron cerrar el caso bajo la clasificación de suicidio, lo que para los manifestantes representa un intento de minimizar la gravedad de los hechos.

PIE DE FOTO:

Cientos de estudiantes de la carrera de Enfermería salieron a las calles para exigir justicia por la muerte de la joven Yerli Yeritza.

FOTO: María Moreno