Los guías tienen que cruzar ranchos para poder llegar hasta la zona arqueológica
María Moreno CORRESPONSAL / NOTICIAS

Como cada inicio de año cientos de habitantes del municipio de Ocosingo, llegaron a la zona arqueológica Toniná, para recibir la energía, el cambio, las vibras buenas y el comienzo que representa un nuevo año a través del ritual Maya.
Sin embargo este 2024 esta tradición se vio perjudicada ya que desde hace varios meses las puertas de Toniná, se mantienen cerradas, esto debido a los conflictos sociales que han surgido desde el pasado mes de abril del 2023, cuando propietarios de la zona Valle pidieron al Instituto Nacional de Antropología e Historia el pago por usar propiedad ajena.
Sin embargo hasta el momento el INAH no ha dado respuesta alguna, y es que de acuerdo a los trabajadores de la zona arqueológica los propietarios han solicitado el pago equivalente a 15 mil pesos por mes, un pago exagerado puesto que no se reúne la cantidad por qué el turismo es poco.
A pesar de la situación algunos guías de turismo han optado por cruzar los ranchos de la zona Valle para llevar a los visitantes hacia la parte de atrás de la zona arqueológica para poder tomarse la foto sin embargo no pueden cruzar más allá ya que se encuentra delimitado y con seguridad para evitar cruzar. Las autoridades del municipio de Ocosingo han mantenido oídos sordos a esta situación esperando que sea el Gobierno Federal el que pueda poner solución.
Mientras tanto este 2024 el ritual Maya, las buenas vibras, la energía, tendrá que esperar hasta que se resuelva y vuelvan a dar paso para poder llegar a las majestuosas ruinas de Toniná.
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Este 2024 esta tradición se vio perjudicada ya que desde hace varios meses las puertas de Toniná, se mantienen cerradas.
Foto: María Moreno
