Daniela Grajales NOTICIAS

Los árboles contribuyen a reducir la contaminación ambiental y climática antropogénica, es decir, causada por los seres humanos. Además, protegen el suelo y son esenciales para lograr un desarrollo sostenible, por eso cada 28 de junio se conmemora el Día Mundial del Árbol, proclamado por el Congreso Mundial Forestal.
Miguel Ángel Pérez Farrera, encargado del herbario del Instituto de Ciencias Biológicas de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), comentó que el objetivo de esta fecha es generar conciencia sobre la importancia de los recursos forestales y, sobre todo, de los árboles.
Desafortunadamente, hoy en día, a pesar de las visibles manifestaciones de los efectos del cambio climático y la deforestación, muchas personas y políticas públicas en el mundo no toman en cuenta la importancia de las áreas verdes urbanas y los bosques.
Destacó que los árboles ayudan, por ejemplo, a mitigar las altas temperaturas. Estudios revelan que en las ciudades, con sol directo la temperatura de una banqueta puede oscilar entre los 50 y 55 grados, pero a un metro de distancia bajo la sombra de un árbol disminuye hasta 26.5 grados.
Eso refleja la importancia de conservar y aumentar el arbolado urbano, asimismo, las reservas naturales, áreas protegidas, bosques y demás zonas con abundante vegetación, porque ayudan a disminuir la temperatura y a retener la humedad en los suelos, frenando los escurrimientos.
Enfatizó que en las ciudades donde hay menor presencia de árboles hay menos nubosidad, lo que significa que habrá menos humedad, más evaporación, aumento de temperaturas, escurrimientos fuertes y otros factores ambientales negativos.
“Pulmones urbanos” es un término que se da a la vegetación que existe dentro de la urbanización, cuya función principal es la de mitigar el efecto de las altas temperaturas, aparte de purificar el aire.
El investigador mencionó que en la Depresión Central de Chiapas, por ejemplo, predominan los bosques secos, donde en temporada de sequía los árboles tiran sus hojas por el aumento de la temperatura, después reproducen sus flores, para que con las primeras lluvias salgan los frutos.
Sin embargo, si la sequía es muy prolongada puede afectar directamente a las plantas y los árboles, incluso hasta matarlos, por exceso de calor y falta de agua.
Los árboles contribuyen a reducir la contaminación ambiental y climática antropogénica. – Foto: Daniela Grajales