Jhonatan González NOTICIAS

Son diez los guatemaltecos que desde hace dos años desaparecieron en la Sierra de Chiapas y hasta el momento ninguna de las autoridades de ambos países ha logrado dar con su paradero, aseguró Hugo Arnoldo Blanco, cónsul general de Guatemala en Tuxtla Gutiérrez.

“Hemos estado con la Fiscalía de Personas Desaparecidas dando seguimiento al tema. Desafortunadamente aún no tenemos alguna noticia de la situación de estas 10 personas que, sí, realmente es algo que ha preocupado mucho a México igual que a Guatemala. Entonces tenemos esta información aún pendiente para darle alguna noticia a las familias, que también nos entristece mucho, y esperamos prontamente tener algún avance”, aseveró en entrevista.

Entrevistada vía telefónica Olga García madre de uno de los desaparecidos, recordó que fue el 16 de noviembre de 2023 cuando salieron de una vivienda que rentaban en Frontera Comalapa y posteriormente se dispersaron en comunidades de la misma localidad para vender pollos en crecimiento; sin embargo, nadie volvió a verlos.

“Pues lo que siente mi corazón es que tengo una esperanza, que voy a ver a mi hijo venir, así como salió, regresar, porque yo mismo me acuerdo cuando como un plato de frijol, aunque sea frijolito, lo comemos, si mi hijo estuviera a la par de nosotros comiendo. Pasaron dos navidades encerrado, allá pasó su cumpleaños de él encerrado, no sé si comerán. Solo mi Diosito sabe lo que ellos están pasando”, afirmó.

Los desaparecidos son Dan Josué Rosales Tzunún, Jorge Luis De León, Juan Carlos Calel De León, Luis Alberto Vázquez Sarat, Amílcar Isaac Enríquez Villatoro, Juan Francisco Tupul García, Julio César Vázquez Pérez, Leonardo Morales Vázquez, Mayco Josué Morga Enríquez y Francisco Socorro Morga De León.

Las familias se han mantenido de pie y lucha, ya que durante los primeros días tras la desaparición visitaron el consulado guatemalteco en Comitán de Domínguez, pero no consiguieron nada. Después acudieron a la Fiscalía de Distrito Fronterizo Sierra y no hubo avances. La madre de uno de los jóvenes relató que por el miedo y las extorsiones de las que fueron víctimas, no volvieron a pisar territorio mexicano.

“Solo nos robaron, nos extorsionaron. El “coyote” decía que iban a llegar a tal punto, que diéramos dinero. Bueno, decimos nosotros, por el amor a nuestro familiar, nosotros no nos importaba, nos metimos a deuda, como dice el dinero se repone, la vida no se repone. Y fue en vano ese dinero, hasta pastores nos robaron, hasta siendo pastores nos extorsionaron”, explicó.

Hoy las familias piden un plan de búsqueda real y confrontas genéticas con cuerpos no identificados, además de un trabajo coordinado entre las instituciones competentes, pues la esperanza de reencontrarse prevalece.

PIE DE FOTO:

Salieron a vender pollo en crecimiento y nadie los volvió a ver desde hace dos años.

FOTO: Jhonatan González