Luis Vallejo NOTICIAS
Monseñor Fabio Martínez Castilla, arzobispo de la capital chiapaneca, comentó ante los medios en su conferencia de prensa dominical que el crimen se ha extendido por todas partes trastocando la vida cotidiana de toda la sociedad.
Señaló lo anterior en referencia al asesinato de dos sacerdotes jesuitas misioneros en la diócesis de la Tarahumara, al interior del templo parroquial de Cerocahui, y de un guia de turistas de esa comunidad.
Martínez Castilla aseveró que estos lamentables hechos han puesto, de nueva cuenta al país en el centro de la atención mundial por los altos índices de violencia y añadió que estos parecen no ceder, por la crueldad y la pérdida de sentido de la sacralidad de la vida.
En ese sentido, dijo, “los obispos de México hemos manifestado nuestra profunda preocupación por el sufrimiento de nuestro querido país; vemos con una gran tristeza la pérdida de miles de vidas inocentes que llenan de luto a familias enteras. El crimen se ha extendido por todas partes trastocando la vida cotidiana de toda la sociedad.”.
También reconoció que la Iglesia, no ha hecho lo suficiente en la evangelización de los pueblos y para que los valores del Evangelio permeen en las personas, de tal manera que estos se conviertan en criterios de vida y de comportamiento social.
Al finalizar Monseñor reconoció que hoy más que nunca, es necesario redoblar esfuerzos y que aún falta mucho por hacer en la reconstrucción del tejido social, al menos desde la labor pastoral que es la que les compete como iglesia.
