Sergio García
CORRESPONSAL/NOTICIAS


Tapachula.- En pequeñas mini caravanas que desafían al gobierno mexicano, siguen ingresando migrantes haitianos por toda la Frontera Sur entre México y Guatemala para establecerse por hasta un año fecha en que podrían durar el trámite de sus documentación.
Los migrantes caribeños, especialmente mujeres embarazadas, niños, adolescentes y hombres cruzan el caudaloso río Suchiate por las comunidades de los municipios fronterizos para caminar en medio del monte, barrancas y zonas donde la autoridad pasa desapercibida.
En su desesperación de ser vistos y asegurados por las autoridades mexicanas, dejan tirado sus ropas, alimentos y otros artículos que traen su tránsito rumbo a la ciudad.
Algunos migrantes que observan la circulación de las unidades de las autoridades, buscan esconderse en medio de los potreros para no ser detenidos y subidos a las unidades.
Ahora, muchos taxistas y choferes de colectivos no quieren trasladar a los haitianos porque Yemen ser detenidos por las autoridades federales.
Por lo que al estar cerca de la ciudad, los haitianos tienen que caminar varios kilómetros para acercarse a la zona urbana y poder buscar alguna casa en renta para establecer en Tapachula.
Algunos pobladores de las comunidades orientan a los migrantes para que lleguen a la ciudad, porque desconocen la ruta para poder adentrarse a la zona urbana, ya que en ocasiones traen a muchos niños y adolescentes bajo los fuertes rayos del sol o las lluvias.
En medio de este complejo tema que viven los haitianos en el norte, en el sur no dejan de entrar extranjeros sorteando con tal de llegar a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), en busca de ser refugiados.
Otros migrantes de Cuba, han adoptado por tomar transporte para dirigirse hasta la Costa de Chiapas al municipio de Mapastepec para avanzar rápidamente a los estados de la República y llegar al norte del país.